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Cristina Fernández de Kirchner hace historia en Argentina

Cris­tina Fer­nán­dez de Kir­ch­ner alcanza una vic­to­ria polí­tica his­tó­rica en Argentina

Sólo un can­di­dato pre­si­den­cial, sólo un hom­bre, Juan Domingo Perón, tres veces pre­si­dente, logró una vota­ción supe­rior (61.8%) a la que Cris­tina Fer­nán­dez alcanzó en las últi­mas elec­cio­nes pre­si­den­cia­les en Argen­tina (más del 53%). La ten­den­cia elec­to­ral mar­cada desde las pri­ma­rias de agosto se con­so­lidó a lo largo de los últi­mos meses, for­ta­le­ciendo la posi­ción de las fuer­zas del Par­tido Jus­ti­cia­lista, aglu­ti­na­das en torno al kir­ch­ne­rismo, dán­dole una arro­lla­dora vic­to­ria a Cris­tina Fernández.

El resul­tado final, como muchos ana­lis­tas lo seña­lan, era más que pre­vi­si­ble, Cris­tina Fer­nán­dez logró alcan­zar en su reelec­ción el regis­tro elec­to­ral más alto desde la recu­pe­ra­ción de la demo­cra­cia Argen­tina en 1983, superando incluso, las vota­cio­nes obte­ni­das por líde­res caris­má­ti­cos como Ricardo Alfon­sín y Car­los Menen. Con esta vic­to­ria, Cris­tina Fer­nán­dez logra un ter­cer man­dato con­se­cu­tivo para el jus­ti­cia­lismo, algo que no tenía ante­ce­dente en la his­to­ria reciente argen­tina. El único momento en la his­to­ria polí­tica argen­tina en el cual un único par­tido logró pro­lon­gar su man­dato guber­na­men­tal por tres perio­dos con­se­cu­ti­vos se regis­tró en los albo­res del siglo XX, con los dos perio­dos de Hipó­lito Iri­go­yen y uno de Mar­celo Tor­cuato de Alvear (14 años con­se­cu­ti­vos), ambos, figu­ras impor­tan­tes del Par­tido Radi­cal argen­tino. Con esta vic­to­ria, Cris­tina Fer­nán­dez escribe su nom­bre y el de su par­tido en los anales de la his­to­ria, por ser la pri­mera can­di­data en darle al pero­nismo una ter­cera vic­to­ria con­se­cu­tiva y por ser la pri­mera mujer en alcan­zar una reelección.

Cris­tina Fer­nán­dez pro­lon­gará su man­dato hasta el año 2015, con una vota­ción mayor al 53% del elec­to­rado, pul­ve­ri­zando de manera cate­gó­rica los sue­ños de los repre­sen­tan­tes de la opo­si­ción, obte­niendo una ven­taja his­tó­rica de 37 pun­tos a su más cer­cano per­se­gui­dor, el gober­na­dor socia­lista de Santa Fe, Her­mes Bin­ner que obtuvo casi el 17% de las pre­fe­ren­cias elec­to­ra­les. Muy por detrás de ellos, se ubicó Ricardo Alfon­sín, radi­cal de cuna, líder de la Unión para el Desa­rro­llo Social. El cuarto lugar fue para Alberto Rodrí­guez Saá, gober­na­dor de San Luís y can­di­dato por Com­pro­miso Fede­ral. Siendo los gran­des per­de­do­res de la jor­nada, el ex pre­siente pero­nista Eduardo Duhalde y la dipu­tada Elisa Carrió, quie­nes ocu­pa­ron el quinto y sép­timo lugar, res­pec­ti­va­mente. Atrás quedó ese 23% que Carrió obtuvo en las pre­si­den­cia­les de 2007 y que la ubicó en el segundo lugar de las preferencias.

Cabe seña­lar que en los últi­mos comi­cios elec­to­ra­les no sólo estuvo en juego la Pre­si­den­cia de la Repú­blica Argen­tina, sino tam­bién la elec­ción de miem­bros del par­la­mento y gober­na­do­res, auto­ri­da­des, que depen­diendo de los resul­ta­dos fina­les, podrían haber equi­li­brado la lucha de pode­res exis­tente entre jus­ti­cia­lis­tas y radi­ca­les a lo largo de toda la his­to­ria polí­tica gau­cha. Sin embargo, el resul­tado fue el mismo, el kir­ch­ne­rismo logró la mayo­ría abso­luta en el par­la­mento, con­so­lidó un blo­que de 37 esca­ños de un total de 72 en el Senado y recu­peró la mayo­ría en la cámara de Dipu­tados, per­dida en las elec­cio­nes legis­la­ti­vas de 2009. Asi­mismo, el par­tido de gobierno tam­bién se ase­guró la admi­nis­tra­ción de 20 de las 24 pro­vin­cias luego de haber triun­fado en los nueve dis­tri­tos que ele­gían gober­na­dor, con figu­ras como Daniel Scioli en Bue­nos Aires, quién obtuvo el 57% de los votos, y el de Fran­cisco Pérez, quien ven­ció en Men­doza, a un for­tí­simo can­di­dato radi­cal como Roberto Igle­sias. Visto el mapa elec­to­ral nacio­nal argen­tino, pode­mos afir­mar que sólo la ciu­dad de Bue­nos Aires, Santa Fe, San Luis y Corrien­tes tie­nen un can­di­dato opositor.

Las esta­dís­ti­cas son abru­ma­do­ras, el kir­ch­ne­rismo ha logrado con­cen­trar la mayor fuerza polí­tica de la his­to­ria. Más allá de los núme­ros y las cifras, lo más tras­cen­dente, seña­lan los espe­cia­lis­tas argen­ti­nos, es la den­si­dad del poder popu­lar, ins­ti­tu­cio­nal y polí­tico que podrá admi­nis­trar Cris­tina Fer­nán­dez en los pró­xi­mos cua­tro años. El elec­to­rado ha optado por man­te­ner el rumbo de los últi­mos años, las cifras son incon­tes­ta­bles, ha pri­mado en el ima­gi­na­rio polí­tico argen­tino un sen­ti­miento de pro­fundo con­ser­va­du­rismo, nadie ha que­rido arries­gar lo poco o mucho que se ha con­se­guido en el segundo periodo kir­ch­ne­rista. Popu­lista o no, clien­te­lista o no, inter­ven­cio­nista o no, esta­tista o no, el modelo impuesto desde el gobierno parece haber sedu­cido a la inmensa mayo­ría del pue­blo argentino.

La expan­sión eco­nó­mica argen­tina, los pla­nes de ayuda social a los más pobres, los sub­si­dios al trans­porte y a la ener­gía, así como la figura caris­má­tica de Cris­tina Fer­nán­dez, que­rida y res­pe­tada por los sec­to­res menos favo­re­ci­dos en la Argen­tina, han sido, sin lugar a dudas, los pun­tos cla­ves de esta hazaña polí­tica. Si a eso le suma­mos la inca­pa­ci­dad del resto de par­ti­dos para esta­ble­cer acuer­dos y con­sen­sos que arro­ja­sen una única can­di­da­tura de opo­si­ción, capaz de capi­ta­li­zar el des­con­tento que muchas de las polí­ti­cas ofi­cia­lis­tas han gene­rado entre la clase media y los sec­to­res con­ser­va­do­res durante los últi­mos años, con una pro­puesta de gobierno cen­trista y atrac­tiva que ampliase el espec­tro polí­tico argen­tino, lo ocu­rrido en estas elec­cio­nes no es otra cosa que la cró­nica de una vic­to­ria anun­ciada. Una vic­to­ria que erige al pero­nismo (a pesar de sus his­tó­ri­cas dispu­tas inter­nas vivi­das desde la muerte de su líder) como el movi­miento con mayor fuerza nacio­nal y al radi­ca­lismo y movi­mien­tos disi­den­tes, res­pec­ti­va­mente, como par­ti­dos inca­pa­ces de hacerle som­bra, al menos no durante algún tiempo.

Este enorme poder polí­tico, este amplio manejo que podrá ejer­cer Cris­tina Fer­nán­dez resulta preo­cu­pante para un impor­tante sec­tor de la pobla­ción argen­tina, quien teme que el estilo auto­ri­ta­rio, ver­ti­cal y rígido, ter­mine por mar­car la tónica del gobierno, de un gobierno que teniendo la con­vic­ción de no deberle nada a nadie, estime que puede hacer y des­ha­cer a su antojo sin tener que ren­dirle cuen­tas a nadie, mucho menos a una opo­si­ción inexis­tente que al pare­cer ha per­dido en estos últi­mos tiem­pos el sen­tido de la historia.

El gobierno girará en torno a la figura de Cris­tina Fer­nán­dez. Por su estilo social y su pasado polí­tico, se sabe que el círculo de con­se­je­ros y ami­gos cer­ca­nos a la pre­si­denta es muy redu­cido, que las deci­sio­nes de gobierno, de las más insig­ni­fi­can­tes a las más impor­tan­tes, son toma­das única­mente por Fer­nán­dez y su sole­dad, sobre todo luego de la par­tida de su esposo, el pre­si­dente Nes­tor Kir­ch­ner, que la voz de la pre­si­denta eclipsa a todas las demás, y que su voca­ción por la mono­po­li­za­ción del debate polí­tico muchas veces le ha abierto fren­tes incluso al inte­rior de su movi­miento. Ella sabe que en este segundo man­dato todas las luces y reflec­to­res se posa­rán sobre ella, que el aplauso o rechazo de la pobla­ción ante su con­ducta será directo, que está sola, que ella será el único artí­fice de sus triun­fos y la única res­pon­sa­ble de sus fra­ca­sos. Todo esto que puede ser una for­ta­leza, puede tam­bién ser su mayor debi­li­dad, sin inter­me­dia­rios que sir­van como para­rra­yos ante los pro­ble­mas y las cri­sis que todo gobierno atra­viesa, la pre­sen­cia mediá­tica de su figura puede ter­mi­nar per­diendo apoyo, des­gas­tán­dose más rápido de lo pre­visto. En todo caso, la ausen­cia de una posi­ción cohe­rente y media­na­mente arti­cu­lada, capaz de explo­tar los erro­res del gobierno, le dan un campo de acción mayor y un poder nunca antes visto.

Cris­tina Fer­nán­dez tiene la posi­bi­li­dad his­tó­rica de hacer un gobierno para el recuerdo, tiene la mesa ser­vida para pro­fun­di­zar las refor­mas socia­les nece­sa­rias para superar los pro­ble­mas que la cri­sis de inicios de siglo generó en su país. Al mismo tiempo, Cris­tina Fer­nán­dez deberá sal­dar algu­nas deu­das de gobierno que aún no honra, la mejora de los ser­vi­cios socia­les, la lucha con­tra la corrup­ción guber­na­men­tal, el res­peto por las liber­ta­des civi­les, la mejora de su rela­ción con los medios de comu­ni­ca­ción (Cla­rín y La Nación, por citar sólo algu­nos), la pre­ser­va­ción del ritmo de cre­ci­miento exhi­bido durante los últi­mos años, la diver­si­fi­ca­ción de sus expor­ta­cio­nes y la con­so­li­da­ción de la ins­ti­tu­cio­na­li­dad argen­tina, son algu­nos de los temas que enca­be­zan la lista de prio­ri­da­des del nuevo gobierno.

La cam­paña elec­to­ral ya quedó atrás, a pesar de lo peli­groso que resulta para la salud demo­crá­tica de un pue­blo la con­cen­tra­ción casi abso­luta del poder polí­tico en un único par­tido o en una única per­sona, como parece ser este el caso, la nación argen­tina habló en las urnas, y pre­fi­rió a la figura fuerte de Cris­tina que al vació de poder que muchos veían en la opo­si­ción. Man­te­ner el rumbo, el orden, la tran­qui­li­dad que­bra­dos antes de 2003, han sido la apuesta del elec­to­rado, pero ahora el kir­ch­ne­rismo debe enfren­tar otros retos e inau­gu­rar un nuevo capí­tulo en la larga novela peronista.

Se pre­sume que la Argen­tina ten­drá menos cre­ci­miento durante los pró­xi­mos meses, difi­cul­ta­des por el incre­mento de la tasa infla­cio­na­ria y pro­ble­mas por el valor del dólar. En lo inme­diato, el kir­ch­ne­rismo deberá fre­nar la fuga de capi­ta­les, la misma que hasta sep­tiem­bre bor­deó los 19 mil millo­nes de dóla­res y agregó unos 800 millo­nes más en la pri­mera semana de octu­bre. Para ello, es nece­sa­rio mar­car dis­tan­cia con sec­to­res radi­ca­les, que ape­lando a un dis­curso pura­mente ideo­ló­gico y carente de sus­tento téc­nico alguno, se nie­gan a imple­men­tar polí­ti­cas fis­ca­les res­pon­sa­bles. El gobierno de Fer­nán­dez, como opi­nan algu­nos, deberá ten­der puen­tes de diá­logo con el sec­tor empre­sa­rial, finan­ciero, bur­sá­til y comer­cial. Sólo así podrá hacer frente a pro­ble­mas como el retraso cam­bia­rio, los des­ajus­tes fis­ca­les y el achi­ca­miento del supe­rá­vit comer­cial. En tal sen­tido, Cris­tina Fer­nán­dez, deberá tomar deci­sio­nes rápi­das para evi­tar mayo­res des­ajus­tes, lo pri­mero, como ocu­rre en este tipo de situa­cio­nes, será nom­brar a un equipo téc­nico de nivel que sea capaz de brin­dar tran­qui­li­dad a los mer­ca­dos finan­cie­ros, los mis­mos que aún tie­nen dudas sobre el dis­curso, muchas veces ambi­guo, del gobierno, sin que ello sig­ni­fi­que, como a veces se trata de hacer creer a la pobla­ción, la renun­cia a los idea­les de jus­ti­cia social enar­bo­la­dos por la pre­si­dente y su par­tido a lo largo de su historia.

Que el poder no obnu­bile a Cris­tina Fer­nán­dez, que la mesura polí­tica, el res­peto por el adver­sa­rio y la res­pon­sa­bi­li­dad eco­nó­mica se ins­ta­len en Casa Rosada y se pro­yec­ten a toda la nación argen­tina, que el auto­ri­ta­rismo pero­nista de un impor­tante sec­tor del gobierno ceda frente a las prác­ti­cas demo­crá­ti­cas de toda socie­dad abierta, que la prensa no se vea per­se­guida por los adic­tos al régi­men ni por la clien­tela que trata de apro­ve­char la mili­tan­cia par­ti­da­ria para copar los pues­tos públi­cos, que los par­ti­dos de opo­si­ción se rees­truc­tu­ren y sean capa­ces de vigi­lar y fis­ca­li­zar al gobierno y que la socie­dad argen­tina no renun­cie a los idea­les de jus­ti­cia social y liber­tad, son los deseos que alber­ga­mos todos los que habi­ta­mos en esta patria grande lla­mada Sudamérica.


Rafael Rodrí­guez Campos

Escribe en www.agoraabierta.blogspot.com

Profetas como Steve Jobs condenan a la humanidad a la más cruel de las esclavitudes

La depen­den­cia tec­no­ló­gica es bru­tal y des­pia­dada hasta el punto que tene­mos que des­ti­nar buena parte de nues­tros ingre­sos a pagar las fac­tu­ras del telé­fono, inter­net y demás ser­vi­cios telemáticos

Steve Jobs — CEO

Res­pecto de lo que se cree del CEO gurú Ste­ven Jobs, muchos de sus inven­tos han calado en el incon­ciente colec­tivo de la huma­ni­dad solo para retra­sar un poco más su inte­li­gen­cia, para hacerlo más super­fi­cial y menos activo hasta dis­traerlo del pen­sa­miento natu­ral y des­bor­darlo al con­su­mismo sal­vaje . No digo que esto nece­sa­ria­mente sea nega­tivo, cada uno es libre y tiene dere­cho de ele­gir su medio de entre­te­ni­miento, pero los que enten­de­mos un poco más de temas infor­má­ti­cos tene­mos con­cien­cia de que sus inven­tos de corta dura­ción, sus con­tri­bu­cio­nes tec­no­ló­gi­cas iban de acuerdo a sus férreos intere­ses económicos.

Jobs tenía la faci­li­dad de ir de empresa en empresa inno­vando el apa­rato que ayer había­mos adqui­rido, hasta dejarlo eco­nó­mi­ca­mente super­ren­ta­ble. Por supuesto que su muerte no deten­drá sus inven­tos crea­dos para hacer­nos más idiotas.

Al res­pecto un com­pleto y arrie­gado artículo extra­ido de La Haine de Car­los de Urabá:

Pro­fe­tas como Steve Jobs con­de­nan a la huma­ni­dad a la más cruel de las esclavitudes

Por culpa del mal tiempo tuve que espe­rar más de cinco horas la salida de mi vuelo a Madrid en el aero­puerto de Gua­rul­hos en Sao Paulo. Algo que he detes­tado siem­pre son esas salas ates­ta­das de pasa­je­ros som­no­lien­tos y abu­rri­dos que aguar­dan una lla­mada para embar­car. Enton­ces resig­nado a mi suerte me puse a pasear por la ter­mi­na­les de vue­los inter­na­cio­na­les. El aero­puerto de Gua­rul­hos es gigan­tesco y la gente viene y va apre­su­rada por los lar­gos pasi­llos empu­jando los carri­tos car­ga­dos de male­tas. Al obser­var el pano­rama durante algu­nos minu­tos me quedé total­mente per­plejo. pero, ¿qué es esto? los pasa­je­ros sen­ta­dos en las amplias salas como si fue­ran galli­nas pico­tea­ban ham­brien­tos el pienso vir­tual en sus compu­tado­res per­so­na­les, en su telé­fo­nos per­so­na­les, en su tableta iPod personal.

Claro, la clave de éxito es man­te­ner ocu­pada la mente y lle­nar el vacío que nos acon­goja. Los indi­vi­duos sin pes­ta­ñear con las pupi­las dila­ta­das ensi­mis­ma­dos nave­ga­ban en un reali­dad para­lela, por otros mun­dos qui­zás más atrac­ti­vos y emo­cio­nan­tes que este. Sus ros­tros no expre­sa­ban nin­gún sen­ti­miento ni ale­gría ni de tris­teza, nadie te saluda, no existe la comu­ni­ca­ción ni ver­bal ni cor­po­ral ni nada por el estilo, cada quien engor­dando su ego con­cen­tra­dos en sus mas­tur­ba­cio­nes men­ta­les. Silen­cio, por favor, que hay res­pe­tar pri­va­ci­dad de las coba­yas. Incluso algu­nos faná­ti­cos mane­ja­ban tres telé­fo­nos móvi­les; el del tra­bajo, el de la fami­lia y el de la amante. En el colmo de la gula varias pan­ta­llas gigan­tes de tele­vi­sión tras­mi­tían un variado menú vía saté­lite. Si supie­ran que yo ape­nas cargo en mi male­tín un lápiz y una libreta ¡que ver­güenza! ¿Qué dirán de mi? que soy un inadap­tado, un ser prehis­tó­rico de la edad de pie­dra. Cuando te pre­sen­tas a alguien ya no te pre­gun­tan por tu nom­bre sino cuál es el número de tu telé­fono móvil, cuál es tu email o si per­te­ne­ces a Face­book o a Mys­pace. Esa es tu identidad.

Todos los indi­vi­duos cor­ta­dos con la misma tijera y ves­ti­dos con los mis­mos tra­jes, la misma cor­bata, los mis­mos zapa­tos, comiendo lo mis­mos sand­wi­ches y ham­bur­gue­sas. Una exi­tosa clo­na­ción que envi­dia­rían los crea­do­res del la oveja Dolly. No con­ten­tos los pla­ni­fi­ca­do­res o gran­des her­ma­nos con­du­cen al redil por los pasi­llos hasta los esta­blos del duty free, las cafe­te­rías o res­tau­ran­tes. El bom­bar­deo de pro­pa­ganda no cesa ni un ins­tante: com­pra este, com­pra el otro; hoy esta­mos de reba­jas, ¡apro­ve­cha pen­dejo! más telé­fo­nos inte­li­gen­tes, PC mági­cos, cáma­ras foto­grá­fi­cas de alta defi­ni­ción, el último grito de la moda, per­fu­mes, des­odo­ran­tes, trago fino, whisky, vodka, tabaco. ¡Y yo con unos cuan­tos dóla­res mano­sea­dos en los bol­si­llos que no me alcan­zan ni para un perrito caliente!

Lo que más me impactó fue el com­por­ta­miento feme­nino. Que ale­gría se les marca en el ros­tro a ellas cuando des­cuel­gan sus telé­fo­nos móvi­les y vani­do­sas con­tes­tan ali­sán­dose el pelo. “¡Hello! ¡Hello! My dar­ling. Fine, thanks” –por­que en esta secta sólo se habla en inglés– Las urra­cas par­lan­chi­nas pue­den pasarse horas y horas de chá­chara. ¿qué estu­pi­de­ces habla­rán ? –no quiero ni saberlo. Con razón las gran­des mul­ti­na­cio­na­les de tele­fo­nía móvil dupli­can o tri­pli­can cada año sus ganan­cias. La psi­co­lo­gía feme­nina ha sido estu­diada a con­cien­cia por los exper­tos en un afán por des­ve­lar sus pun­tos fla­cos. Para la mujer – igual para los hombres-es fun­da­men­tal verse refle­jada en el espejo de Nar­ciso; el espe­jito mágico ante el que maqui­llarse, pei­narse, sen­tirse atrac­ti­vas, desea­das y reci­bir esos piro­pos ciber­né­ti­cos que les sublime el super ego. Te amo, te quiero –les susu­rra el androide con voz aca­ra­me­lada– pes­ta­ñea un cora­zon­cito en la pan­ta­lla HD del compu­tador, del telé­fono móvil o del iPod 4S y ellas sus­pi­ran exta­sia­das. Esto vale más que extraer millo­nes de barri­les de petróleo.

Me fui al baño a ori­nar y ¡adi­vi­nen lo que me encon­tré en el retrete! a un japo­nes jugando al poker en su tableta iPod !no puede ser! todo esto supe­raba cual­quier pelí­cula de cien­cia fic­ción. Vaya mierda en lo que ha con­ver­tido al mundo nues­tra civi­li­za­ción super­in­dus­tria­li­zada. Se me revol­vie­ron las tri­pas, que­ría salir corriendo y esca­par a algún paraíso per­dido. Pero, ¿adónde? tan sólo tenía un billete para ir a Madrid donde el guión de la come­dia se repite al pie de la letra.

El espí­ritu comu­ni­ta­rio y tri­bal que es uno de los ras­gos carac­te­rís­ti­cos del ser humano inexo­ra­ble­mente se extin­gue. Los autis­tas cual esta­tuas de pie­dra con el culo ator­ni­llado a los asien­tos siguen des­ci­frando los jero­glí­fi­cos en sus compu­tado­res. Otros enchu­fa­dos a sus auri­cu­la­res y micró­fo­nos ultra­sen­si­bles hablan con las pare­des en un des­qui­ciado soli­lo­quio. La pala­bra carece de valor, el con­ver­sar, el inter­cam­biar ideas y opi­nio­nes es una debi­li­dad humana caduca y retró­grada. Para estos autó­ma­tas no existe otro len­guaje que el de los íconos, las imá­ge­nes reto­ca­das en pho­tos­hop, los códi­gos y nue­vos géne­ros dis­cur­si­vos donde se uti­li­zan los emo­ti­co­nes que dan expre­sión facial y ges­tual a la per­so­na­li­dad virtual.

A los pocos días de regre­sar a mi casa los noti­cie­ros tras­mi­tie­ron una noti­cia urgente: Steve Jobs, el super­hé­roe ciber­né­tico, ha muerto. ¡oh, una tra­ge­dia griega de dimen­sio­nes pla­ne­ta­rias! Los chi­nos llo­ran, los indios llo­ran, los negros llo­ran, los cara­pá­li­das llo­ran. Tre­mendo bata­cazo para sus incon­di­cio­na­les. Se murió el mago de los ton­tos y todos sus deu­dos repar­ti­dos por los cinco con­ti­nen­tes se sien­ten unos pobres huer­fa­ni­tos. Claro, Steve era un ejem­plo a seguir, un triun­fa­dor nato salido de la nada. Un empre­sa­rio frío y cal­cu­la­dor que revo­lu­cionó el mundo de la infor­má­tica junto Billy Gates y demás lum­bre­ras del Sili­con Valley.

Los titu­la­res de la prensa son más que elo­cuen­tes: « Murió Steve Jobs, el Leo­nardo da Vinci del siglo XXI » « Duelo por el genio inno­va­dor » « Adiós al gurú de la era ciber­né­tica » Este meque­trefe, que amasó una for­tuna astro­nó­mica ven­diendo pienso vir­tual a las coba­yas, no es más que un burdo ladrón que nos roba el tesoro más pre­ciado: el tiempo. Aun­que nos cueste acep­tarlo somos efí­me­ros y nos pasa­mos horas, días, años, déca­das rela­cio­nán­do­nos por entero con las maqui­ni­tas y arti­lu­gios infor­má­ti­cos. Uno de sus lemas pre­fe­ri­dos es « si quie­res pue­des volar sólo hace falta volun­tad » Papá Steve estoy abu­rrido ¿qué hago? Las mari­po­si­tas revo­lo­tean alre­de­dor de una luce­sita, dan­zan exta­sia­das dis­fru­tando de los orgas­mos múl­ti­ples marca Apple o Micro­soft. « Gra­cias a Jobs soy más inte­li­gente » « mi Mac es inmor­tal » « Soy pobre pero voy a aho­rrar para com­prarme un Mac » Ni siquiera los niños se sal­van de la peste digi­tal pues desde muy tem­prana edad domi­nan los orde­na­do­res, el inter­net, el chat o los telé­fo­nos móvi­les, adic­tos a los jue­gue­ci­tos de Atari, al brea­ckout, la Play Sta­tion, el Nin­tendo. La buena crianza de los cacho­rros es vital para ase­gu­rar la super­vi­ven­cia de la especie.

Apple no ha inven­tado nin­gún soft­ware ni nin­gún hard­ware sino que ha pira­teado o com­prado las paten­tes. Ipod ya exis­tía con el nom­bre de Mp3 pero el diseño del objeto es el que marca la dife­ren­cia. Los inge­nie­ros de Apple diri­gi­dos por Jobs le da un toque espe­cial, un diseño sen­sual y una esté­tica mini­ma­lista a cada uno de sus pro­duc­tos. Cuando los aca­ri­cia­mos son ter­sos y sua­ves y nos pro­voca un impulso irre­fre­na­ble poseer­los. El secreto está en esti­mu­lar el sen­tido del tacto, el de la vista y del oído; que suene la musi­quita celes­tial, que titi­len las luce­si­tas en la pan­ta­lla HD y la yema de los dedos con un « one touch » nos con­duzca al país de las maravillas.

Los con­su­mi­do­res del mundo espe­ra­ban ansio­sos nove­da­des que Jobs les tenía reser­va­das. El sumo pon­tí­fice en el altar mayor pre­sen­taba los nue­vos pro­duc­tos Apple en medio mon­taje inter­ga­lác­tico de rayos láser y fue­gos arti­fi­cia­les. Los fie­les aplau­dían his­té­ri­cos al hijo de Dios ¡hosana hosana! ya ha caído el ben­dito maná del cielo: el iPod, el Mac­Book, el Nano, el Mac­book Air, el Shuf­fle, el iPhone, el iPhad. más LSD, más opio, más cocaína. Steve Jobs esta­ble­ció una depen­den­cia afec­tiva con sus clien­tes que lo con­si­de­ra­ban el guía, el padre o el maestro.

Hoy la tec­no­lo­gía se erige como el único Dios ver­da­dero. De nada valen las abs­trac­cio­nes mís­ti­cas o espe­cu­la­cio­nes meta­fí­si­cas. El mate­ria­lismo ha ganado la bata­lla. Las máqui­nas, la robó­tica y la inte­li­gen­cia arti­fi­cial nos hacen la vida más sen­ci­lla pues nos libe­ran de los tra­ba­jos más pesa­dos y nos brinda más tiempo de ocio. Tiempo que pasa­mos atra­pa­dos en esa tela­raña del Inter­net, en el Twit­ter, el chat, la tele­fo­nía móvil o la tele­vi­sión digital.

El estado poli­cial al ser­vi­cio de la demo­cra­cia gra­cias a los ade­lan­tos tec­no­ló­gi­cos con­tro­lan nues­tras vidas. Los agen­tes de « inte­li­gen­cia » son capa­ces de inda­gar y escru­tar lo más pro­fundo de nues­tro ser; cada correo, cada lla­mada tele­fó­nica, las cuen­tas ban­ca­rias, nues­tros vicios y debi­li­da­des. Todos esta­mos bajo sos­pe­cha. Los perros sabue­sos hus­mean ras­treando nues­tras hue­llas, nos tie­nen ficha­dos, nos obser­van con sus saté­li­tes y las cáma­ras de segu­ri­dad. Nues­tro his­to­rial está escrito con letras mayús­cu­las en los archi­vos infor­ma­ti­za­dos de la cen­tral de datos. The big brot­her wat­ching you

La infor­ma­ción es poder. las gran­des mul­ti­na­cio­na­les de EEUU, Europa o el Japón mono­po­li­zan el sec­tor de las comu­ni­ca­cio­nes e impo­nen la dic­ta­dura tec­no­ló­gica. Ellos son los due­ños de los paten­tes y los dere­chos de tras­mi­sión, ellos son los patro­nes de la aldea glo­bal y noso­tros los sier­vos que aca­ta­mos las órde­nes. No se lucha por una socie­dad más justa y equi­ta­tiva sino por eter­ni­zar el impe­rio capi­ta­lista a nivel planetario.

¿Quién se atreve a cri­ti­car la socie­dad del bie­nes­tar? no pode­mos que­dar­nos rele­ga­dos a un pasado caver­na­rio pues per­te­ne­ce­mos a la civi­li­za­ción del futuro. Los avan­ces cien­tí­fi­cos nos hacen más inte­li­gen­tes y más com­pe­ti­ti­vos al aumen­tar la capa­ci­dad de alma­ce­na­miento de nues­tra mente. De esta forma somos capa­ces de con­tras­tar los datos, abrir infi­ni­dad de docu­men­tos y archi­vos que engran­de­cen nues­tra memo­ria indi­vi­dual y colec­tiva. Las per­so­nas tras­fie­ren toda su memo­ria vital a un disco duro donde los chips micro­pro­ce­sa­do­res son una exten­sión más de nues­tro cerebro.

El cere­bro de los homí­ni­dos supe­rio­res es muy malea­ble. Hay razo­nes neu­ro­psi­co­ló­gi­cas que demues­tran la vul­ne­ra­bi­li­dad de la mente humana y lo deli­cada que es la con­quista de nues­tra auto­no­mía y liber­tad personal.

El impe­ria­lismo no con­tento con con­quis­tar la tie­rra, la luna o marte ahora quiere domi­nar nues­tro sub­cons­ciente, lobo­ti­zar nues­tro cere­bro y poseer hasta nues­tra alma. Igual que hacen los bru­jos en los ritua­les de vudú o magia negra, somos los muñe­qui­tos a los que les cla­van alfi­le­res mani­pu­lando nues­tra capa­ci­dad de dis­cer­nir y tomar decisiones.

La gente se cree impor­tante cuando opri­men una tecla y ¡hágase la luz y la luz fue hecha! se enciende el tele­vi­sor, la compu­tadora o el telé­fono móvil, sale el sol y de repente una voz ange­li­cal anun­cia que nos han man­dado un email, que hemos reci­bido SMS, que alguien nos está twi­teando o cha­teando y nos sen­ti­mos feli­ces pues no estoy solo, luego existo. Ese simio que lle­va­mos den­tro se merece un cacahuete.

La era digi­tal ha supuesto una de las fases más alie­nan­tes de evo­lu­ción humana. La depen­den­cia tec­no­ló­gica es bru­tal y des­pia­dada hasta el punto que tene­mos que des­ti­nar buena parte de nues­tros ingre­sos a pagar las fac­tu­ras del telé­fono, inter­net y demás ser­vi­cios tele­má­ti­cos.. Sen­ten­cia­dos a tra­ba­jar más horas extras, a pedir un cré­dito o ven­derle el alma al dia­blo si que­re­mos seguir chu­pando de la teta de la madre: una nueva pan­ta­lla gigante de tele­vi­sión extra­plana y de plasma Lsd Thos­hiba full HD 4 Hdmi, un compu­tador de la última gene­ra­ción el desk­top board Intel DX58SO 7 extreme edi­tion de 32 nm con pura poten­cia de pro­ce­sa­miento, la tableta iPod con una pan­ta­lla sen­si­ble al tacto y una capa­ci­dad de memo­ria flash de 64 gigby­tes mucho más íntima y efi­ciente que cual­quier PC o el telé­fono android Sam­sung Galaxy Mini que cuenta con GPS, WiFi y Blue­tooth. En este juego de las apa­rien­cias es nece­sa­rio demos­trar el esta­tus social al que per­te­ne­ces y ya han sur­gido dis­tin­tas cas­tas como: la chica Nokia, el chico Sam­sumg, el niñato Bla­ck­Be­rry, la niñata Sony Erics­son, el eje­cu­tivo Goo­gle o Ama­zon. Si mi vecino lo com­pró ¿ por qué yo no?

En nues­tro pla­neta toda­vía exis­ten pue­blos y etnias que per­ma­ne­cen en un esta­dio pri­mi­tivo y arte­sa­nal; indí­ge­nas, cam­pe­si­nos, cuyo medio de super­vi­ven­cia es el tra­bajo de la tie­rra. Ha lle­gado la hora de redi­mir a esa gran huma­ni­dad mar­gi­nada de la gran baca­nal capi­ta­lista. Todos esos parias hay que inte­grar­los en el sis­tema para que gene­ren rédi­tos y ganan­cias a las com­pa­ñías trans­na­cio­na­les. La pri­mera etapa ha sido la con­quista tele­vi­siva, el siguiente paso dotar­los de equi­pos infor­má­ti­cos obso­le­tos, popu­la­ri­zar el inter­net en las salas públi­cas o envi­ciar­los a los telé­fo­nos móvi­les de bajo coste. Lo prio­ri­ta­rio en los pla­nes de edu­ca­ción o alfa­be­ti­za­ción es cimen­tar el mito de la tecnología.

La revo­lu­ción digi­tal es una arma de doble filo ya que se con­vierte en la alter­na­tiva más efec­tiva a los gran­des mono­po­lios de la infor­ma­ción. Aflo­ran miles y miles de pági­nas webs inde­pen­dien­tes, la prensa on line, las radios libres, la lite­ra­tura, el arte, el vídeo, los docu­men­ta­les y pelí­cu­las under­ground. El cibe­res­pa­cio es el sitio ideal para publi­car todas esas obras y crea­cio­nes que de otra manera per­ma­ne­ce­rían en el ano­ni­mato. La con­tra­in­for­ma­ción es el reto. Pero lamen­ta­ble­mente pre­va­lece la idio­tez mediá­tica, la más gro­tesca zafie­dad, la char­la­ta­ne­ría barata, la pro­pa­ganda o el comer­cio más des­afo­rado. No somos per­so­nas sino con­su­mi­do­res y los con­su­mi­do­res pre­fie­ren enaje­narse con los temas más tri­via­les, el chis­mo­rreo, los jue­gui­tos on line, los pro­gra­mas o la por­no­gra­fía que cul­ti­var el inte­lecto y tomar conciencia.

La filo­so­fía racio­na­lista y el pen­sa­miento car­te­siano domi­nan la socie­dad con­tem­po­rá­nea. Los poe­tas y los román­ti­cos ya pue­den sui­ci­darse. Es nece­sa­rio adap­tar­nos al signo de los tiem­pos y pre­fe­ri­mos com­par­tir nues­tro tiempo libre con los jugue­tes tec­no­ló­gi­cos antes que con la fami­lia o los ami­gos. Esta­mos ansio­sos por devo­rar el pienso vir­tual y ¡straw­be­rry fields fore­ver! mi compu­tador, mi telé­fono, mi tableta, mi tele­vi­sor extra­plano es lo prio­ri­ta­rio. El modelo indi­vi­dua­lista y el ego­cen­trista va incre­men­tán­dose a pasos agigantados.

Ven­der, ven­der y ven­der más pro­duc­tos Apple, Micro­soft, Intel, Goo­gle e inun­dar el mer­cado con más telé­fo­nos móvi­les Nokia, Sam­sumg, Sony Smartp­hone. La oferta se queda corta y la demanda obliga a dupli­car la pro­duc­ción. Las mul­ti­na­cio­na­les para aho­rrar cos­tes y aumen­tar las ganan­cias fabri­can sus artícu­los en China o en la India explo­tando la mano de obra barata. Mate­rias pri­mas como el col­tan que es una mez­cla de mine­ra­les impres­cin­di­ble para la fabri­ca­ción de con­den­sa­do­res de los com­po­nen­tes digi­ta­les, ha ser­vido para finan­ciar a varios ban­dos en la segunda gue­rra del Congo, un con­flicto que ha pro­vo­cado más de 5.000.000 de muer­tos. Cuando los compu­tado­res, los telé­fo­nos, las tele­vi­sio­nes, los elec­tro­do­més­ti­cos en gene­ral se ave­rían o pasan de moda toda esa basura y esa cha­ta­rra muy con­ta­mi­nante crea un grave pro­blema ambien­tal en los paí­ses desa­rro­lla­dos. No hay mejor solu­ción que expor­tarla a Ghana, Kenia, Nige­ria, China o la India donde millo­nes de parias de se encar­ga­rán del pro­ceso de reci­clado. Esta tam­bién puede con­si­de­rarse parte de la « ayuda huma­ni­ta­ria » y no hay más que agra­de­cer a los « ami­tos blan­cos » su buen corazón.

Apple cie­rra su ejer­ci­cio del 2011 con un bene­fi­cio neto de 25 920 millo­nes de dóla­res. Una cifra record pero que no colma sus expec­ta­ti­vas. Steve Jobs, que se sabía mori­bundo, dejó bien tra­zado en su tes­ta­mento los pla­nes pre­vis­tos para los pró­xi­mos años. Aun­que físi­ca­mente haya des­a­pa­re­cido ahora comienza una vida vir­tual que lo pro­yecta a la inmor­ta­li­dad. Los pro­duc­tos digi­ta­les ya son con­si­de­ra­dos artícu­los de pri­mera nece­si­dad igual que el pan, el agua o la leche. La fina­li­dad es que estén pre­sen­tes en cada puesto de tra­bajo, en cada escuela, en la uni­ver­si­dad, en el hogar y hasta en la sopa. La alie­na­ción impe­rial y sus cade­nas invi­si­bles cum­ple a la per­fec­ción con su obje­tivo glo­ba­li­za­dor, sus leyes fas­cis­tas no tie­nen otro pro­pó­sito que en el nom­bre de la « liber­tad y la demo­cra­cia » escla­vi­zar a la gran humanidad.

Mar Muerto

La Haine

La muerte de Gadafi, la muerte de un perro

Hay que ser muy perro para ale­grarse de algo así, hay que ser muy fas­cista para pen­sar que esto es una buena noti­cia para nadie…


Los rebel­des libios foto­gra­fiando con sus móvi­les el cadá­ver de Gadafi. Foto: GTres

Así trai­ciona el capi­ta­lismo a sus anti­guos camaradas, así agra­dece a sus vie­jos cola­bo­ra­do­res, así saluda la pre­po­ten­cia de sus ex-amigos y que alguna vez le inun­da­ban de elo­gios. La trai­ción es un mérito impuesto por aque­llos que mane­jan el mundo den­tro de un sis­tema ase­sino y cruel.

Al res­pecto copio este intere­sante artículo para enten­der un poco la rele­van­cia de las accio­nes empren­di­das por la OTAN que en nom­bre de la liber­tad ase­sina sin pie­dad a sus ex-amigos:

El día 20 de sep­tiem­bre de 2011 ha muerto un perro de ori­gen libio lla­mado Gadafi. Sabueso que casual­mente fue el máximo repre­sen­tante de un país miem­bro de Nacio­nes Uni­das, rico en petró­leo, gas y otros recur­sos natu­ra­les. Este jue­ves de octu­bre, el perro Gadafi se encon­traba escon­dido en su ciu­dad natal de Sirte tras unas tube­rías, momen­tos des­pués de que los paci­fis­tas de la OTAN bom­bar­dea­ran la cara­vana en la que inten­taba huir con el resto de sus lea­les sabue­sos. Afor­tu­na­da­mente, según la mayo­ría de medios de comu­ni­ca­ción del mundo, esta cara­vana fue inter­cep­tada y ame­tra­llada, momento en el cual el perro Gadafi huyó a pesar de estar herido en la nuca y en la pierna. Agra­cia­da­mente, los rebel­des de la perrera libia le die­ron caza, y pese a que el anti­guo Gene­ral con­si­guió bal­bu­cear unas pala­bras en len­guaje humano para evi­tar su muerte “No dis­pa­ren, no disparen”1 éstas, no sabe­mos si por mal pro­nun­cia­das o por­que no con­si­guie­ron con­ven­cer a los rebel­des, no sur­tie­ron efecto y los valien­tes insur­gen­tes libios lo ulti­ma­ron con triun­fal deci­sión. Y luego una vez muerto, para rema­tar la faena, le hicie­ron fotos con sus cáma­ras digitales2, como aque­llos pes­ca­do­res que se retra­tan con el gran atún que aca­ban de cap­tu­rar o los caza­do­res que lo hacen con un ciervo. Pero Gadafi no era ni atún ni ciervo, era un perro y fue cazado como tal. ¿O no?

Lle­ga­dos a este punto nos resulta sor­pren­dente que las aso­cia­cio­nes en defensa de los ani­ma­les no se hayan pro­nun­ciado en con­tra de esta caza de perros tor­nada en bru­tal espec­táculo. Pen­saba que si está­ba­mos con­tra el mal­trato ani­mal de toros y vaqui­llas, lo esta­ría­mos tam­bién en el caso de estos popu­la­res y cono­ci­dos mamí­fe­ros. Tam­poco lo han hecho, por supuesto, la mayo­ría de las más reco­no­ci­das ONG y aso­cia­cio­nes en defensa de los dere­chos huma­nos, por aque­llo de que hasta hace bien poco el perro Gadafi era, en reali­dad, un ser humano. Sí, han leído bien, un ser humano, una per­sona. Y no sólo uno más entre noso­tros, sino alguien bien ave­nido por los gobier­nos de medio mundo, una vez que per­mi­tió que las empre­sas extran­je­ras (co)participaran en la explo­ta­ción de los recur­sos natu­ra­les en suelo libio. Es curioso que sus anti­guos “ami­gos”, como Aznar, el Rey de España, Zapa­tero, Ber­lus­coni o Sar­kozy le die­ran la espalda y olvi­da­ran su con­di­ción humana a una velo­ci­dad tan sor­pren­dente. Pasó de ser ilus­tre invi­tado a pala­cios y pala­ce­tes a ser per­se­guido como un pul­goso en las bom­bar­dea­das calles de su ciu­dad natal(3) . Y es lo que tiene Roma, que no paga a traidores(4). Parece men­tira que Gadafi estu­viera tan dro­gado o fuera de la reali­dad entre sus jai­mas, mer­ce­des y sen­sua­les vír­ge­nes guar­daes­pal­das, como para no saberlo. Qui­zás fuera el fin de su ardor antim­pe­ria­lista el que lo hizo arro­di­llarse de miedo hasta trans­for­marse en perro y que­rer nego­ciar con otros de su nueva con­di­ción tras años de peleas. Cosas del poder, que trans­forma a no pocas per­so­nas en sabue­sos y des­pués, cuando el resto de cáni­dos bien situa­dos en la perrera glo­bal les tra­tan como tales, ya no tie­nen a nin­gún humano a quién recla­marle la defensa de su ante­rior condición.

La muerte del ex-imperialista Gadafi es una tra­ge­dia por todo lo humano que pudiera tener un perro bau­ti­zado por perros. El viejo Muam­mar, como se ha dicho en dece­nas de bien docu­men­ta­dos artícu­los como los de San­tiago Alba5, hace tiempo dejó de ser un gober­nante pro­gre­sista y se trans­formó en un dic­ta­dor para gran parte de su pue­blo, ade­más de un lacayo del impe­ria­lismo para otros afri­ca­nos, a los que mal­tra­taba bajo acuer­dos con la neo­li­be­ral Unión Euro­pea para con­tro­lar los flu­jos migratorios6. Pero la muerte del ser humano Gadafi, su retrans­mi­sión, fil­ma­ción y repro­duc­ción en alta defi­ni­ción en todos los medios de comu­ni­ca­ción del “veo-sistema-mundo” con­for­man un espec­táculo de muerte bochor­noso, asque­roso y repug­nante. La ima­gen del cuerpo de Gadafi des­tar­ta­lado, acri­bi­llado y sur­cado por ríos de san­gre es un puñe­tazo en toda la cara para cual­quier per­sona de este mundo que quiera seguir siendo per­sona, y no perro. Las hue­llas de la muerte de Gadafi son los foto­gra­mas de pri­sio­ne­ros judíos tor­tu­ra­dos por los nazis. De judíos y comu­nis­tas, socia­lis­tas y homo­se­xua­les, gita­nos y libre pen­san­tes famé­li­cos, fus­ti­ga­dos como perros en la perrera nacional-capitalista de Hitler. Cual­quier foto­gra­fía en pri­mer plano de Gadafi muerto y tor­tu­rado, es un insulto para toda la huma­ni­dad, una veja­ción infame pro­pia de perros enlo­que­ci­dos o de seres huma­nos imbui­dos en una carrera defi­ni­tiva y fre­né­tica hacia el neo-fascismo. Por muy hijo de su madre que fuera Gadafi nada jus­ti­fica esta muerte y su pos­te­rior recrea­ción infame. Hay que ser muy perro para ale­grarse de algo así, hay que ser muy fas­cista para pen­sar que esto es una buena noti­cia para nadie. Hace falta estar abso­lu­ta­mente dis­lo­cado, diso­ciado y enlo­que­cido para siquiera ima­gi­nar que será un avance para esta comu­ni­dad frag­men­tada en mil peda­zos lla­mada género humano.

Gadafi debió de ser juz­gado por un tri­bu­nal inde­pen­diente, que lo con­de­nara por sus nume­ro­sos y pre­sun­tos crí­me­nes. Un tri­bu­nal repleto de seres huma­nos que hicie­ran pre­va­le­cer una jus­ti­cia uni­ver­sal y demo­crá­tica, que por supuesto no tene­mos. Pero pues­tos a no tener, resulta que tam­poco tene­mos ese tri­bu­nal. Lo que tene­mos son perros sin bozal ni correas, pero no de cual­quier tipo, de presa, que corren por doquier: impe­ria­lis­tas y nazi-fascistas de la peor calaña que dis­fru­tan matando y obe­de­ciendo las órde­nes de otros perros imbui­dos en ele­gan­tes tra­jes que per­ma­ne­cen impo­lu­tos ante la san­gre derra­mada por otros. San­grías de inocen­tes y peca­do­res, que nos sal­pi­can a todos mien­tras sigan siendo derra­ma­das y san­ti­fi­ca­das por los laico-curas de nues­tro tiempo (laca­yos de los medios, ONG abyec­tas, etc). Y para los puris­tas, tene­mos san­gre fresca de inocen­tes todos los días: en Pales­tina, Irak, Afga­nis­tán y ahora tam­bién kurda, a manos de los sabue­sos del Estado turco en estos días que no cono­cen vedas.

El mundo está loco, pero afor­tu­na­da­mente menos que este sis­tema. En la sutil dife­ren­cia encon­tra­mos la llama incan­des­cente de la espe­ranza, la fe en un ser humano ase­diado pero irre­duc­ti­ble por el Fran­kes­tein capi­ta­lista que sus mis­mos ante­pa­sa­dos ayu­da­ron a cons­truir mien­tras al mismo tiempo inven­ta­ban la poe­sía, la gui­ta­rra eléc­trica o el motor solar. Des­co­nec­te­mos al mons­truo y empe­ce­mos a sanar de una mal­dita vez. Es fac­ti­ble y como bien están demos­trando “los indig­na­dos” de muchos paí­ses, la solu­ción será mun­dial si no que­re­mos que sea abso­lu­ta­mente pre­ca­ria. Claro que requiere de muchos esfuer­zos, colec­ti­vos e indi­vi­dua­les, pero las hemo­rra­gias de los otros son las nues­tras: de los huma­nos trans­for­ma­dos en perros y la de aque­llos valien­tes que no se quie­ren arro­di­llar ni poner a cua­tro patas. La rabia de los perros enlo­que­ci­dos es con­ta­giosa y ame­naza con trans­for­mar­nos, a todos, en mas­co­tas del sis­tema. Pie­zas inter­cam­bia­bles y supri­mi­bles del lego y los capri­chos del Capital.

La muerte de Gadafi y el espec­táculo de muerte tré­mula que lo acom­paña es, en defi­ni­tiva: un circo para perros, una tra­ge­dia para todo ser humano.

Nada que cele­brar fuera de la perrera.

* Jon Juanma es el seu­dó­nimo artístico/activista de Jon E. Illes­cas Martínez.

Este artículo fue aca­bado el 21 de octu­bre de 2011. Tiene licen­cia Crea­tive Com­mons y puede ser libre­mente repro­du­cido siem­pre que se res­pete la inte­gri­dad del texto, for­mato y se cite la auto­ría del mismo sin ánimo de lucro.

Blog: http://jonjuanma.blogspot.com/

Correo: jonjuanma@gmail.com

Notas:

1. NORMAN, Jos­hua: “”Don’t shoot”: Qaddafi’s last moments”. CBS: http://www.cbsnews.com/8301-503543_162-20123183–503543.html.

2. WILLIAMS, David: “Who shot Gad­dafi? New video shows blood pou­ring from dic­ta­tor imme­dia­tely before death but mys­tery surrounds coup de grace”. The Daily Mail: http://www.dailymail.co.uk/news/article-2051361/GADDAFI-DEAD-VIDEO-Dictator-begs-life-summary-execution.html.

3. Amigo de Aznar: http://www.libertaddigital.com/mundo/2011–04-16/aznar-gadafi-es-un-amigo-extravagante-pero-un-amigo-1276420683/ . Amigo de Ber­lus­coni: http://www.cadenaser.com/internacional/articulo/berlusconi-penso-dimitir-acceder-bombardear/csrcsrpor/20110909csrcsrint_10/Tes. Amigo de Zapa­tero: http://www.publico.es/internacional/363500/cuando-muamar-gadafi-era-aun-un-buen-amigo-de-espana. Amigo del Rey: http://www.elmundo.es/elmundo/2011/02/24/espana/1298560734.html. Amigo de Sar­kozy: http://blogs.the-american-interest.com/wrm/2011/03/03/the-mead-list-worlds-top-ten-gaddafi-toads/.

4. “Roma tra­di­to­ri­bus non praemiat”

5. En este enlace se pue­den ver los diver­sos artícu­los de este autor res­pecto a Libia: http://www.rebelion.org/autores.php?id=7.

6. Gadafi adver­tía a la UE que si ésta no con­tro­laba la inmi­gra­ción “Europa se vol­verá negra”, ver en: http://www.presseurop.eu/es/content/news-brief-cover/410511-gadafi-insiste-en-su-chantaje-con-la-inmigracion y http://www.presseurop.eu/es/content/article/273551-el-chantaje-de-gadafi.

Extracto de una entrevista a Hitler

 

“…lle­gué a la con­clu­sión de que una cam­paña con­tra los judíos sería tan popu­lar como exitosa…”

Adolf Hitler junto a Fran­cisco Franco

Podría­mos decir que este hom­bre que nació como un ser humano y que des­pués trans­mutó en un Mons­truo encarna todos los horro­res de nues­tra historia.

Horro­res fun­da­men­ta­dos que vie­nen de los recuer­dos de un holo­causto que puso de rodi­llas a una parte del mundo y que en nom­bre de una polí­tica demen­cial ordenó ase­si­nar a miles, a millo­nes de judíos.

El Füh­rer –como le decían sus cama­ra­das– no estaba loco; tenía la sufi­ciente capa­ci­dad men­tal para pla­near lo que sería “su lucha”; una segunda gue­rra mun­dial donde él esta­ría a la cabeza.

El tiempo no podrá olvi­dar sus abe­rran­tes actos y cuando la huma­ni­dad ter­mine eva­po­rán­dose en un final sin pro­nós­ti­cos, el Füh­rer Adolfo Hitler seguirá reinando en ese mundo de oscu­ri­da­des y peca­dos infinitos.

¿Por qué eli­gió a los judíos como obje­tivo de su bru­tal cam­paña de terror? En el extracto de esta entre­vista nos trata de expo­ner sus indig­nan­tes razones:

“Es claro y está pro­bado en la prác­tica y por los hechos de todas las revo­lu­cio­nes que luchan por idea­les, por mejo­ras de cual­quier tipo que debe estar com­ple­men­tado por una lucha sobre alguna clase social o casta.

Mi obje­tivo es crear tur­bu­len­cia revo­lu­cio­na­ria de pri­mera clase, sin impor­tar los méto­dos y medios que deba usar en el pro­ceso. Revo­lu­cio­nes ante­rio­res estu­vie­ron diri­gi­das sobre los cam­pe­si­nos, la nobleza, el clé­rigo o dinas­tías y su red de mili­cias feu­da­les, pero en nin­gún caso la revo­lu­ción triunfó sin la pre­sen­cia de la vara lumi­nosa que puede con­du­cir y cana­li­zar el odio de las masas.

Con esto en mente, exploré los even­tos revo­lu­cio­na­rios de la his­to­ria y me pre­gunté con­tra qué ele­mento racial en Ale­ma­nia podía des­tar mi pro­pa­ganda de odio con la mayor pro­ba­bi­li­dad de éxito. Tenía que encon­trar a la víc­tíma ade­cuada, una con­tra la cual la lucha ten­dría sen­tido en el sen­tido material.

Le puedo ase­gu­rar que exa­miné toda posi­ble y pen­sa­ble solu­ción a este pro­blema y, sope­sando todo fac­tor ima­gi­na­ble, lle­gué a la con­clu­sión de que una cam­paña con­tra los judíos sería tan popu­lar como exitosa.

Hay pocos ale­ma­nes que no hayan estado enoja­dos por la actua­ción de los judíos o, en su defecto, que hayan sufrido pér­di­das a tra­vés de ellos de un modo u otro.

Des­pro­por­cio­na­da­mente a su pequeño número, repre­sen­tan una inmensa parte de la riqueza nacio­nal ale­mana, lo que puede fácil­mente usarse pro­ve­cho­sa­mente para el estado y el público gene­ral, como podrían las per­te­nen­cias de los monas­te­rios, los arzo­bis­pos y la nobleza.

Una vez que el odio y la bata­lla con­tra los judíos sea real­mente fomen­tada, su resis­ten­cia nece­sa­ria­mente se des­mo­ro­nará en el menor tiempo posi­ble. Están total­mente inde­fen­sos y nadie se levan­tará para protegerlos”

Tra­du­cido de: http://www.nizkor.org/hweb/people/h/hitler-adolf/hitler-1922.html

¿Comprende Ollanta Humala, la relación existente entre las instituciones castrenses y el sistema democrático?

Lo que no que­re­mos es que el señor Humala se rodee de una corte de uni­for­ma­dos que asu­man la labor de guar­dia per­so­nal o guardaespaldas…

La rela­ción entre las ins­ti­tu­cio­nes cas­tren­ses y el sis­tema demo­crá­tico en el Perú siem­pre ha sido compleja

Las ins­ti­tu­cio­nes cas­tren­ses, en el marco de los sis­te­mas demo­crá­ti­cos, cum­plen un rol de vital impor­tan­cia para la con­so­li­da­ción de la ins­ti­tu­cio­na­li­dad del Estado y para el res­guardo de los intere­ses nacio­na­les. A las Fuer­zas Arma­das, les corres­ponde garan­ti­zar la inde­pen­den­cia, la sobe­ra­nía y la inte­gri­dad terri­to­rial de la Repú­blica. La Poli­cía Nacio­nal, por su parte, tiene el deber man­te­ner y res­ta­ble­cer el orden interno. Ambas ins­ti­tu­cio­nes care­cen de una voca­ción deli­be­rante y deben estar subor­di­na­das al poder cons­ti­tu­cio­nal. Reco­no­cen al Pre­si­dente de la Repú­blica como su jefe supremo y des­plie­gan sus accio­nes en abso­luta con­so­nan­cia con el man­dato cons­ti­tu­cio­nal y legal.

Esta es una refle­xión que los ciu­da­da­nos debe­mos tener muy en claro. En una demo­cra­cia, en un sis­tema cons­ti­tu­cio­nal en el cual la labor de los pode­res públi­cos y pri­va­dos se encua­dra den­tro de los pará­me­tros esta­ble­ci­dos por la Cons­ti­tu­ción, los miem­bros de estas ins­ti­tu­cio­nes se con­vier­ten en fie­les guar­dia­nes del orden y el sis­tema demo­crá­tico. Siendo ello así, es nece­sa­rio que quie­nes asu­man la direc­ción de dichas enti­da­des, gocen de los méri­tos pro­fe­sio­na­les, aca­dé­mi­cos y mora­les sufi­cien­tes para la asun­ción de tamaña res­pon­sa­bi­li­dad, ya que como hemos seña­lado, a ellos les corres­ponde velar por la segu­ri­dad externa e interna de la nación.

Pero, si a las ins­ti­tu­cio­nes cas­tren­ses les corres­ponde guar­dar un pro­fundo res­peto por los prin­ci­pios y valo­res cons­ti­tu­cio­na­les y demo­crá­ti­cos, al poder civil, y en espe­cial al gobierno de turno, le corres­ponde guar­dar res­peto por la ins­ti­tu­cio­na­li­dad de estas enti­da­des. En ese sen­tido, el gobierno, y el Pre­si­dente de la Repú­blica, debe­rán de ser muy cui­da­do­sos al momento de pro­mo­ver el nom­bra­miento de los man­dos mili­ta­res y poli­cia­les, ins­ta­lando en este pro­ceso, una lógica basada en la meri­to­cra­cia y el pro­fe­sio­na­lismo. No basta, como seña­lan algu­nos, el cri­te­rio de la anti­güe­dad para nom­brar a un mili­tar o poli­cía como miem­bro de la alta direc­ción de sus res­pec­ti­vas instituciones.

Es muy peli­groso para la salud demo­crá­tica de un país la poli­ti­za­ción de las ins­ti­tu­cio­nes cas­tren­ses o la mili­ta­ri­za­ción de la polí­tica, refle­jada muchas veces en los pro­ce­sos de cam­bio o reforma al inte­rior de las fuer­zas arma­das o poli­cia­les. El nom­bra­miento indis­cri­mi­nado de un grupo de poli­cías o mili­ta­res con el único cri­te­rio de favo­re­cer a los alle­ga­dos al régi­men es una prác­tica que debié­ra­mos des­te­rrar de nues­tro país. El gobierno de turno no puede uti­li­zar el poder que la ciu­da­da­nía le ha con­fe­rido para aten­tar con­tra la estruc­tura misma de estas ins­ti­tu­cio­nes. Nom­brar a una per­sona por el sólo hecho de tra­tarse de un amigo, alle­gado, o en el peor de los casos, un títere de los desig­nios de quien detenta el poder de turno, no sólo dis­tor­siona la rela­ción entre el poder civil y las ins­ti­tu­cio­nes cas­tren­ses, sino tam­bién genera inco­mo­di­dad, des­con­tento y mella la moral de los efec­ti­vos mili­ta­res y poli­cia­les que ven cómo la una per­sona carente de los méri­tos sufi­cien­tes se coloca al frente de su institución.

Los últi­mos cam­bios sufri­dos en la Poli­cía Nacio­nal del Perú y los ascen­sos lle­va­dos a cabo en las Fuer­zas Arma­das han vuelto a colo­car sobre la dis­cu­sión este viejo debate en torno a la rela­ción exis­tente entre el gobierno y los ins­ti­tu­tos arma­dos. Los fan­tas­mas del copa­miento y mili­ta­ri­za­ción de la socie­dad aún están pre­sen­tes en el ima­gi­na­rio colec­tivo nacio­nal. Algu­nos perua­nos aún tene­mos pre­sente los nefas­tos hechos ocu­rri­dos durante la última dic­ta­dura de Fuji­mori y Mon­te­si­nos. La uti­li­za­ción de las fuer­zas mili­ta­res y poli­cia­les por la dic­ta­dura como soporte del régi­men, la com­pra de con­cien­cias al inte­rior de estas ins­ti­tu­cio­nes, la adhe­sión, el res­paldo cóm­plice de los altos man­dos y la suje­ción total de los mis­mos a los dic­ta­dos de la mafia de lo noventa, fue­ron males que los perua­nos no debié­ra­mos estar dis­pues­tos a vol­ver a padecer.

La expe­rien­cia his­tó­rica nos demues­tra lo peli­groso que ha resul­tado para el país el hecho de mal uti­li­zar el poder guber­na­men­tal al con­so­li­dar alre­de­dor suyo a una cúpula cas­trense capaz de blin­dar todos y cada uno de los actos de gobierno, sin impor­tar si estos son acor­des o no al orden cons­ti­tu­cio­nal, tal y como ocu­rrió durante los diez años del fuji­mo­rato. Recor­de­mos que en esa época, una de las téc­ni­cas que el dic­ta­dor uti­lizó para con­se­guir la adhe­sión y apoyo a su pro­yecto mafioso, fue la de imple­men­tar una polí­tica de ascen­sos y pases al retiro indis­cri­mi­nada sin mayor cri­te­rio que los deli­rios de poder del jefe de Estado, es decir, asciendo a quie­nes obe­de­ce­rán sin chis­tar mis órde­nes, paso al retiro a quie­nes tie­nen una posi­ción más ins­ti­tu­cio­nal que muchas veces se opone a los intere­ses del régimen.

Con la caída de la clep­to­cra­cia fuji­mo­rista, se abrió un nuevo capí­tulo en la his­to­ria mili­tar y poli­cial. Tal y como lo recuerda el ana­lista polí­tico Car­los Basom­brió, en el año 2001 se ini­cia­ron una serie de refor­mas des­ti­na­das a corre­gir esta per­ni­ciosa situa­ción. Deci­mos per­ni­ciosa, ya que si se revi­san las cifras de aquel enton­ces, uno puede obser­var cómo el reparto de ascen­sos dis­tor­sionó toda la lógica mili­tar y poli­cial, lle­gando a tenerse en la poli­cía más jefes (gene­ra­les y coro­ne­les) que alfé­re­ces. Todo un deli­rio. Pero este afán refor­mista, impul­sado por el gobierno de Ale­jan­dro Toledo, per­dió fuerza con la lle­gada del gobierno aprista, y se retornó de ese modo, a la irra­cio­na­li­dad del pasado (52 gene­ra­les y más de 600 coroneles).

El actual gobierno ha reci­bido estas cifras. Esa ha sido la situa­ción que el pre­si­dente Ollanta Humala heredó de manos de Alan Gar­cía. Los 5 años de gobierno últi­mos fue­ron un quin­que­nio per­dido en este pro­ceso de reforma y moder­ni­za­ción de estas enti­da­des. Siendo tan crí­tica la situa­ción, desde luego se avala la deci­sión del gobierno de pasar al retiro a 30 gene­ra­les de la Poli­cía Nacio­nal del Perú en la bús­queda de una estruc­tura mucho más pira­midal al inte­rior de la misma (en 2004, la Direc­ción Poli­cial estimó que para el comando ins­ti­tu­cio­nal reque­ría única­mente de 28 gene­ra­les y 207 coro­ne­les). Sin embargo, si bien es cierto el obje­tivo se jus­ti­fica y res­palda, la pre­gunta que uno debe hacerse y las auto­ri­da­des res­pon­der es cuál ha sido el cri­te­rio para la purga de esos 30 gene­ra­les y no otros. O si lo más con­ve­niente no hubiese sido un pase al retiro gra­dual, como ocu­rre en el caso de la Marina de Gue­rra, que no genere un cisma ins­ti­tu­cio­nal y polí­tico y no ins­tale La duda sobre la trans­pa­ren­cia de la decisión.

Otro dato a tener en cuenta sobre este tema, ha sido lo ocu­rrido con los últi­mos ascen­sos a gene­ral dis­pues­tos por el Minis­te­rio de Defensa. Pocas veces en la his­to­ria, o nunca según algu­nos dicen, se ha obser­vado que un número bas­tante con­si­de­ra­ble de miem­bros de una pro­mo­ción llega al grado de gene­ral en el ejér­cito. Esto acaba de ocu­rrir hace unos días con el nom­bra­miento de 10 nue­vos gene­ra­les per­te­ne­cien­tes a la pro­mo­ción 1984 Héroes de Mar­ca­va­lle, coin­ci­den­te­mente miem­bros de la pro­mo­ción del Pre­si­dente de la Repú­blica. Con lo cual, más de la mitad de gene­ra­les ascen­di­dos, 19 ha sido leal número total, todos ellos com­pa­ñe­ros de pro­mo­ción del pre­si­dente Humala, pasa­rán a for­mar parte de la cúpula mili­tar. Más allá de las sus­pi­ca­cias que esta deci­sión genere, no pode­mos sino pre­gun­tar­nos si estos ascen­sos fue­ron meri­tua­dos en fun­ción a cri­te­rios téc­ni­cos, eva­luando el grado de pro­fe­sio­na­lismo, anti­güe­dad, y el res­peto ganado por estos ofi­cia­les al inte­rior de su ins­ti­tu­ción, o si, como tan­tas veces en la his­to­ria, el pre­si­dente de turno con­vir­tió al ejér­cito en una agen­cia de bue­nos empleos para sus ami­gos o sus com­pa­ñe­ros de carpeta.

Nos parece salu­da­ble que en nues­tro país el gobierno haya asu­mido con aplomo la deci­sión de refor­mar y pro­mo­ver cam­bios pro­fun­dos en las ins­ti­tu­cio­nes cas­tren­ses. Preo­cupa sí que esa misma volun­tad no sea la misma cuando se trata de las Fuer­zas Arma­das, en el espe­cial del ejér­cito. Es salu­da­ble que la Poli­cía Nacio­nal del Perú ini­cie un periodo de rein­ge­nie­ría que la for­ta­lezca. Espe­re­mos que los cam­bios no que­den allí, espe­re­mos que esta volun­tad se con­cre­tice en la adop­ción de medi­das que pasen por ele­var el sueldo de los efec­ti­vos mili­ta­res y poli­cia­les, refor­mar su sis­tema pre­vi­sio­nal, mejo­rar la aten­ción de salud que la fami­lia mili­tar y poli­cial recibe por parte del Estado, pro­mo­ver la meri­to­cra­cia en los pro­ce­sos de ascen­sos, cam­bios y con­de­co­ra­cio­nes y la capa­ci­ta­ción cons­tante de los efec­ti­vos, acom­pa­ña­das todas ellas, de una fron­tal con­tra la corrup­ción enquis­tada al inte­rior de la institución.

Nin­gún peruano puede opo­nerse a este tipo de ini­cia­ti­vas, todos que­re­mos que nues­tras ins­ti­tu­cio­nes cas­tren­ses se con­so­li­den, todos desea­mos que el per­so­nal mili­tar y poli­cial reciba un trato digno, que cuente con ingre­sos que le per­mi­tan salir ade­lante y velar por sus fami­lias, todos desea­mos que el poli­cía y mili­tar recu­pe­ren el pres­ti­gio y moral de antaño. En ese sen­tido, toda reforma que apunte a este obje­tivo debe ser res­pal­dada, en el camino, las­ti­mo­sa­mente y eso ocu­rre en todo pro­ceso de esta natu­ra­leza, algu­nos efec­ti­vos ten­drán que se sepa­ra­dos de la ins­ti­tu­ción, son los cos­tos de toda reforma y el pre­cio que debe­mos asu­mir. Lo que los perua­nos no que­re­mos es que el gobierno poli­tice y dis­tor­siona la estruc­tura y orga­ni­za­ción de estas ins­ti­tu­cio­nes. Lo que no que­re­mos es que el señor Humala se rodee de una corte de uni­for­ma­dos que asu­man la labor de guar­dia per­so­nal o guar­daes­pal­das, en lugar depo­nerse al ser­vi­cio de la nación como autén­ti­cos guar­dia­nes del orden y la lega­li­dad. Lo que no que­re­mos es que la pelí­cula de los noventa se vuelva a repe­tir en nues­tro país, pero esta vez de un modo mucho más sofis­ti­cado. Lo que no que­re­mos es que Ollanta Humala se com­porte como un miem­bro más de la pro­mo­ción Héroes de Mar­ca­va­lle y no como nues­tro jefe de Estado. No que­re­mos eso, pues de ser así, no ten­dre­mos a Hugo Chá­vez en pala­cio, sino al fan­tasma de Alberto Fuji­mori ves­tido de verde olivo.

Rafael Rodrí­guez Campos

Escribe en www.agoraabierta.blogspot.com

El mundo de la belleza

En estos tiem­pos de glo­ba­li­za­ción, el mundo de la belleza y el gla­mur se ha empe­zado trans­for­mar hasta alcan­zar carac­te­rís­ti­cas armó­ni­cas inima­gi­na­bles en la gente que se preo­cupa por su ima­gen per­so­nal y que quiere tras­cen­der ante las demás per­so­nas gra­cias a la sus gus­tos y a la moda.

Las épocas donde los esti­los de pei­na­dos y los colo­res que solo eran un tema neta­mente feme­nino se ha expan­dido y se ha inte­grando tam­bién los actua­les gus­tos y ten­den­cias masculinas.

En ese sen­tido y gra­cias a la gran demanda que en estos tiem­pos y que en el futuro se hará de la moda y de los salo­nes de belleza, se hace indis­pen­sa­ble pre­pa­rarse debi­da­mente para empren­der un exce­lente nego­cio que ser­virá para hacer reali­dad tu sueño ado­rado de con­ver­tirte en empresario.

Actual­mente exis­ten muchas ins­ti­tu­cio­nes edu­ca­ti­vas, de pres­ti­gio y de reco­no­cida expe­rien­cia inter­na­cio­nal por la comu­ni­dad de la belleza que se encar­gan de dotar a su alum­nado de las últi­mas ten­den­cias para una per­fecta capa­ci­ta­ción en maqui­llaje pro­fes­sio­nal.

Es impor­tante saber que este intere­sante nego­cio nece­sita de un esfuerzo con­ti­nuó y dia­rio apren­di­zaje en muchas de las téc­ni­cas y espe­cia­li­da­des den­tro de una for­ma­ción inte­gral que mode­lará tu talento y te hará com­pe­ti­tivo para el mer­cado actual.

Te reco­miendo que no des­apro­ve­ches las ven­ta­jas de un buen cen­tro edu­ca­tivo a dis­tan­cia que te ayu­dará a explo­tar tu talento crea­tivo y sacar pro­ve­cho de tus habi­li­da­des natu­ra­les y artís­ti­cas. Si tus metas son empe­zar un nego­cio intere­sante y muy lucra­tivo, hacer reali­dad tu sueño de mane­jar tu pro­pio salón de belleza, esfuérzate y pre­pá­rate debi­da­mente y serás aquel exi­toso empre­sa­rio de la belleza que el mundo está buscando.

¡Muy buena suerte!

El gran bazar de órganos a la venta

Susanne Lun­din — Al-Jazeera

Lista de Pre­cios — Trá­fico de Órganos

Hace algu­nos días, una amiga mía, inves­ti­ga­dora médica y facul­ta­tiva en un hos­pi­tal sueco, reci­bió una oferta sor­pren­dente en su casi­lla de correo electrónico:

Escrita en mal inglés, la misiva decía: “Me llamo Alex. Soy euro­peo, de 31 años. Nunca he tomado alcohol y no he fumado ciga­rri­llos. Mi san­gre es 0 y tengo buena salud. Si usted nece­sita un tras­plante de hígado estoy dis­puesto a entre­gar parte de mi hígado, pero quiero reci­bir una com­pen­sa­ción con­si­de­ra­ble por hacerlo.”

Seme­jan­tes ofer­tas no son poco comu­nes. Ofer­tas simi­la­res de venta de par­tes cor­po­ra­les apa­re­cen en dife­ren­tes foros y sitios en la web, como ser Mahmnud75.

Este anun­cio es típico: “Soy indio. Nací en Brahm­pur, distrito– Ganjam, Odisha. Tengo 47 años (17–08.-1974). Mi grupo san­guí­neo es 0. Soy estric­ta­mente vege­ta­riano. Estoy intere­sado en ven­der a un esta­dou­ni­dense mi riñón izquierdo por 80.000 dóla­res. Estoy intere­sado en ven­der a un chino – mi riñón dere­cho por 80.000 dóla­res. Estoy intere­sado en un ven­der a un ruso mi cora­zón por 100.000 dóla­res. Estoy intere­sado en ven­der a un japo­nés mi cere­bro por 100.000 dólares.”

Ofer­tas de este tipo se podían ver, hace solo unos pocos años en liver4you.org, que pro­me­tía riño­nes por pre­cios entre 80.000 y 110.000 dóla­res. Los cos­tes de la ope­ra­ción, inclui­dos los hono­ra­rios de los ciru­ja­nos – supues­ta­mente licen­cia­dos en EE.UU., Gran Bre­taña, o las Fili­pi­nas – esta­ban inclui­dos en el precio.

Hoy en día, ese sitio en la web ya no existe. Muchos ciber­mer­ca­dos médi­cos ile­ga­les exis­ten poco tiempo, solo para des­a­pa­re­cer y vol­ver a salir a la super­fi­cie bajo otro nombre.

El papel de Inter­net en las ven­tas ile­ga­les de órga­nos aumenta, pero toda­vía es una pequeña parte de la masiva eco­no­mía glo­bal en teji­dos huma­nos. La Orga­ni­za­ción Mun­dial de la Salud cal­cula que apro­xi­ma­da­mente un diez por ciento de las tras­plan­ta­cio­nes de órga­nos en el mundo es orga­ni­zado mediante transac­cio­nes comerciales.

Cuando los pobres dan a los ricos

El comer­cio en órga­nos sigue un modelo claro, geo­grá­fico: la gente de los paí­ses ricos com­pra órga­nos a la gente en los paí­ses pobres que los vende. En mi inves­ti­ga­ción sobre el trá­fico de órga­nos, he entrado a esos tene­bro­sos mer­ca­dos de órga­nos, sitios donde las par­tes de los cuer­pos de víc­ti­mas de las gue­rras, pri­sio­ne­ros y pobres son ven­di­das como horro­ro­sas mer­can­cías. Muchos de esos órga­nos son com­pra­dos, algu­nos son roba­dos, pero la mayo­ría ter­mina den­tro de los cuer­pos indis­pues­tos de gente acaudalada.

Una mujer, ori­gi­na­ria del Líbano, me dijo que un adi­ne­rado empre­sa­rio de España ofre­ció pagar una suma inmensa por su riñón. Final­mente, sin embargo, no reci­bió un pago en dinero. Su vida actual es mucho peor de lo que era antes, sobre todo debido a com­pli­ca­cio­nes médi­cas des­pués de la ope­ra­ción que le hacen difí­cil tra­ba­jar. His­to­rias seme­jan­tes son con­ta­das por ven­de­do­res de órga­nos que he encon­trado en los anti­guos Esta­dos sovié­ti­cos, Medio Oriente, y Asia.

El trá­fico con órga­nos depende de varios fac­to­res. Uno es la gente angus­tiada; los que tie­nen pro­ble­mas eco­nó­mi­cos o socia­les, o viven en socie­da­des des­ga­rra­das por la gue­rra en las que domina el cri­men o tie­nen un prós­pero mer­cado negro. Es la oferta. Por el lado de la demanda está la gente que corre peli­gro de morir a menos que reciba un tras­plante de órgano. En medio están los ines­cru­pu­lo­sos inter­me­dia­rios que orga­ni­zan los tra­tos entre ven­de­do­res y compradores.

Tam­bién es nece­sa­rio tener acceso a clí­ni­cas bien equi­pa­das y a per­so­nal médico. Clí­ni­cas ade­cua­das se pue­den encon­trar en muchos paí­ses, inclui­dos Irán, Pakis­tán, Ucra­nia, Sudá­frica y las Filipinas.

Las Fili­pi­nas es un cen­tro bien cono­cido para el comer­cio ile­gal con órga­nos y un flo­re­ciente lugar popu­lar para “turismo de tras­plan­tes”. Desde los años noventa hasta 2008 –cuando se adoptó una nueva política– la can­ti­dad de tras­plan­tes que invo­lu­cra­ban la venta de órga­nos de fili­pi­nos a recep­to­res extran­je­ros aumentó con­ti­nua­mente. Muchos ven­de­do­res de órga­nos de Israel, por ejem­plo, fue­ron lle­va­dos con el com­pra­dor a Manila para ser operados.

Estoy intere­sado en ven­der a un esta­dou­ni­dense mi riñón izquierdo por 80.000 dólares…”

Héc­tor es uno de los varios cien­tos de ven­de­do­res de riño­nes docu­men­ta­dos por tra­ba­ja­do­res socia­les en tres ciu­da­des empo­bre­ci­das de la pro­vin­cia Que­zón en las Fili­pi­nas. Su her­mano estaba atra­pado en Mala­sia por enor­mes deu­das con pan­di­llas cri­mi­na­les, de modo que Héc­tor ven­dió uno de sus riño­nes para com­prar su liber­tad. Otro ven­de­dor, Michel, se con­vir­tió él mismo en inter­me­dia­rio; des­pués de ven­der uno de sus riño­nes para pagar por las medi­ci­nas de su padre, el ciru­jano lo obligó a entre­gar más órga­nos. Órga­nos de los fili­pi­nos pobres de Que­zón fue­ron tras­plan­ta­dos en su mayo­ría a recep­to­res de las Fili­pi­nas, Israel, Japón, Corea del Sur y Ara­bia Saudí.

El comer­cio con par­tes del cuerpo humano no es un fenó­meno nuevo. Sin embargo, los nego­cios actua­les no tie­nen pre­ce­den­tes por las ideas y valo­res que han real­zado inopi­na­da­mente el comer­cio en órga­nos. La medi­cina occi­den­tal comienza con el punto de vista de que la enfer­me­dad humana y la muerte son fallas que hay que com­ba­tir. La tec­no­lo­gía de la tras­plan­ta­ción se desa­rro­lla den­tro del clima con­cep­tual –el sueño del cuerpo rege­ne­ra­tivo– y así crece la demanda por pie­zas bio­ló­gi­cas de repuesto.

Un ejem­plo obvio del trato del cuerpo humano como recurso explo­ta­ble es la lista de espera de donan­tes de órga­nos, uti­li­zada en muchos paí­ses. Un hom­bre al que entre­visté recien­te­mente durante un estu­dio de sue­cos que habían estado en una lista de espera para riño­nes, pero que deci­dió com­prar riño­nes en el extran­jero, des­cri­bió cómo fue a Pakis­tán para un tras­plante: “No soy el tipo de hom­bre que usa a otra gente, pero tuve que hacerlo.

Tuve que ele­gir entre morir o recu­pe­rar mi vida.”

En una era de tras­plan­tes de órga­nos a pedido, no hay modo de evi­tar este dilema. Los impe­ra­ti­vos bio­ló­gi­cos que guían el sis­tema de la lista de espera de tras­plan­tes son fácil­mente con­ver­ti­dos en valo­res eco­nó­mi­cos. Como siem­pre, cuando la demanda excede la oferta, la gente no puede acep­tar la espera de su turno. En el caso de par­tes del cuerpo humano, otros paí­ses y los cuer­pos de otra gente siguen ofre­cién­dole la alter­na­tiva que busca.

Susanne Lun­din es pro­fe­sora de etno­lo­gía en la Uni­ver­si­dad Lund, Suecia.

Una ver­sión de este artículo apa­re­ció pri­mero en Pro­ject Syn­di­cate.

Fuente: http://english.aljazeera.net/indepth/opinion/2011/06/2011622124232636233.html

Los derechos humanos de los presos y la problemática carcelaria en el Perú

No se puede, y así lo seña­lan los espe­cia­lis­tas, alber­gar en un mismo pabe­llón a pre­sos pri­ma­rios, jóve­nes, ladro­nes o car­te­ris­tas de poca monta, con delin­cuen­tes rein­ci­den­tes, ran­kea­dos en el mundo de lampa.

El penal de Luri­gan­cho en el Perú

Cuando una per­sona es inter­nada en un esta­ble­ci­miento peni­ten­cia­rio, ya sea en la con­di­ción de sen­ten­ciado o pro­ce­sado, ve res­trin­gido el ejer­ci­cio de un único dere­cho fun­da­men­tal: la liber­tad ambu­la­to­ria. Esto que parece evi­dente, pues no lo es tanto en una socie­dad como la nues­tra en la cual el espa­cio y ambiente en donde trans­cu­rren los días de un pre­si­dia­rio, con­de­nan a esta per­sona a vivir bajo con­di­cio­nes de habi­ta­bi­li­dad ver­da­de­ra­mente inhumanas.

Una socie­dad civi­li­zada y demo­crá­tica debe garan­ti­zar el dere­cho de los reclu­sos y sen­ten­cia­dos a ocu­par esta­ble­ci­mien­tos ade­cua­dos. Ello es así pues este es el único camino para con­cre­ti­zar el obje­tivo que todo régi­men peni­ten­cia­rio moderno se traza como meta más impor­tante: lograr la reedu­ca­ción, reha­bi­li­ta­ción y rein­cor­po­ra­ción del penado a la socie­dad. En ese sen­tido, la mejora pau­la­tina de las con­di­cio­nes de habi­ta­bi­li­dad de un cen­tro de reclu­sión, no sólo ase­gura los dere­chos huma­nos de los pre­sos; sino tam­bién, y esto es algo que quizá se olvida, evita que las cár­ce­les se con­vier­tan en ver­da­de­ras escue­las del delito desde las cua­les se pla­nean y eje­cu­tan los crí­me­nes más abo­mi­na­bles por delin­cuen­tes que una vez pues­tos en liber­tad vuel­ven a delin­quir con una mayor fie­reza, como si bus­ca­ran revan­cha con­tra esa socie­dad y ese Estado que man­te­nién­do­los bajo la som­bra los con­denó al más abso­luto olvido.

El Estado, a tra­vés de sus ins­ti­tu­cio­nes, tiene el dere­cho y el deber de pro­ce­sar y san­cio­nar de manera ejem­plar a toda per­sona que comete un delito, pues el Estado, como orga­ni­za­ción social y polí­tica, debe velar por la segu­ri­dad y tran­qui­li­dad de su ciu­da­da­nía. En tal sen­tido, cuando el Estado ado­lece de una polí­tica cri­mi­nal y car­ce­la­ria cohe­rente, idó­nea, capaz de reha­bi­li­tar a la per­sona que delin­que y evi­tar con ello la rein­ci­den­cia delic­tiva, está incum­pliendo su prin­ci­pal obje­tivo, colo­cán­dose, debido a su inca­pa­ci­dad e indo­len­cia, al mar­gen de su pro­pio orden jurí­dico, el cual lo obliga a velar por los dere­chos de sus ciu­da­da­nos, inclu­sive de aque­llos que se encuen­tran recluí­dos en un penal.

Hemos que­rido hacer estas refle­xio­nes pues hace algu­nos días, el mis­mí­simo direc­tor del INPE (Ins­ti­tuto Nacio­nal Peni­ten­cia­rio), José Luis Pérez Gua­da­lupe, en una entre­vista con­ce­dida a un medio local, dio a cono­cer algu­nas esta­dís­ti­cas que des­cri­ben una reali­dad peni­ten­cia­ria fran­ca­mente esca­lo­friante. En opi­nión de la men­cio­nada auto­ri­dad, la pro­ble­má­tica car­ce­la­ria en el país se ha vuelto casi inma­ne­ja­ble, la falta de pre­su­puesto, apoyo logís­tico, la ausen­cia de volun­tad polí­tica y la corrup­ción ins­ta­lada en las ins­ti­tu­cio­nes encar­ga­das de dar solu­ción a este pro­blema social, son fac­to­res que hacen impo­si­ble la con­se­cu­ción de resul­ta­dos posi­ti­vos en el corto plazo.

De acuerdo a la infor­ma­ción ver­tida se sabe que en el Perú de hoy existe una sobre­po­bla­ción car­ce­la­ria de apro­xi­ma­da­mente 23000 reclu­sos. Por ejem­plo, el penal de Luri­gan­cho tiene capa­ci­dad para 3200, pero hoy alberga a 6000 (hace dos años el número era de 12000). El penal Sarita Colo­nia tiene capa­ci­dad para 572, pero hay 2079. El penal de Hua­ral tiene una capa­ci­dad para 823 inter­nos y hay 2720. El penal de Cañete es para 759 pre­sos pero hoy en día cuenta con 2830 pre­sos. A la luz de estas cifras se puede afir­mar que con una sobre­po­bla­ción de dicha mag­ni­tud es muy difí­cil reha­bi­li­tar al interno, evi­tando de ese modo, la reite­ra­ción de la con­ducta cri­mi­nal una vez que este haya sido puesto en libertad.

Otro pro­blema vin­cu­lado a la sobre­po­bla­ción de las cár­ce­les es el des­go­bierno que se vive en el inte­rior de las mis­mas en cuanto a la orga­ni­za­ción y cla­si­fi­ca­ción de los inter­nos. Resulta lógico pen­sar que en una cár­cel no se puede con­gre­gar indis­cri­mi­na­da­mente a los inter­nos sin nin­gún cri­te­rio de selec­ción. No se puede, y así lo señalan los espe­cia­lis­tas, alber­gar en un mismo pabe­llón a pre­sos pri­ma­rios, jóve­nes, ladro­nes o car­te­ris­tas de poca monta, con delin­cuen­tes rein­ci­den­tes, ran­kea­dos en el mundo de lampa, con varios ingre­sos al penal. Cuando ello ocu­rre, la posi­bi­li­dad de recu­pe­rar social­mente al delin­cuente juve­nil, al cri­mi­nal de deli­tos meno­res, es casi nula, más cuando por razo­nes de esta­tus y por la pro­pia diná­mica cri­mi­nal, estos jóve­nes son cap­ta­dos por los “tai­tas” (reclu­sos que mane­jan la cár­cel) a quie­nes ven como el modelo a seguir, con­vir­tiendo a un cri­mi­nal de alto cali­bre en un ver­da­dero maes­tro, cuyas lec­cio­nes deben ser apren­di­das al pie de la letra si se quiere sobre­vi­vir en esta tie­rra de nadie en la que se ha con­ver­tido la cár­cel peruana.

En la cár­cel, según declara el titu­lar del INPE, la delin­cuen­cia replica su orga­ni­za­ción cri­mi­nal a vista y pacien­cia de la pro­pia poli­cía. El prin­ci­pio de auto­ri­dad se ha per­dido por com­pleto, el Estado es inca­paz de esta­ble­cer las reglas que regu­la­rán la con­vi­ven­cia en su inte­rior. Por ejem­plo, en Luri­gan­cho la dis­tri­bu­ción de los pena­les y cla­si­fi­ca­ción de la pobla­ción car­ce­la­ria replica el modelo cri­mi­nal del grupo, la cua­dra, la banda, y el barrio. En este penal los “árabes” de Villa El Sal­va­dor ocu­pan un pabe­llón, a los “vikin­gos”, de La Vic­to­ria, les corres­ponde el pabe­llón 4, a los de San Mar­tín de Porres se les ha asig­nado el 6, lo mismo ocu­rre con el pabe­llón 10 y el 12, en los cua­les se han ins­ta­lado los cri­mi­na­les de Sur­qui­llo y de Ciu­dad de Dios, res­pec­ti­va­mente. Como es de supo­ner, cuando en una cár­cel la auto­ri­dad es asu­mida por los reclu­sos y no por el Estado, es muy difí­cil con­tro­lar lo que ocu­rre allí aden­tro, es muy difí­cil velar por los dere­chos huma­nos de aque­llos pre­sos que pre­sen­tan un ánimo de enmienda ver­da­dero y que si quie­ren reha­bi­li­tarse, y peor aún, es muy difí­cil des­ba­ra­tar a las ban­das que siguen ope­rando desde sus celdas.

Por eso no debiera sor­pren­der las decla­ra­cio­nes de las auto­ri­da­des del INPE cuando señala que en lo que va del año se han incau­tado más de 3000 telé­fo­nos celu­la­res al inte­rior de los pena­les, los mis­mos que pues­tos en manos de estos cri­mi­na­les les per­mi­ten coor­di­nar accio­nes y desatar el terror en las calles. Mues­tra de todo este des­go­bierno ha sido lo ocu­rrido hace algu­nos días en el penal de Picsi, en Chi­clayo, en donde en un pabe­llón de máxima segu­ri­dad se incau­ta­ron 54 tele­vi­so­res, 37 DVD Y 30 celulares.

A estas esta­dís­ti­cas debe­mos sumarle la dura situa­ción de ese 60% de pobla­ción car­ce­la­ria que se encuen­tra pri­vada de su liber­tad sin sen­ten­cia con­de­na­to­ria. En tér­mi­nos lega­les podría­mos decir que en nues­tro país 6 de cada 10 reclu­sos, sobre los cua­les no ha recaído sen­ten­cia con­de­na­to­ria alguna, se ven obli­ga­dos a com­par­tir sus días con cri­mi­na­les de alta peli­gro­si­dad en esta­ble­ci­mien­tos que care­cen de las con­di­cio­nes de habi­ta­bi­li­dad míni­mas, que vul­ne­ran gra­ve­mente sus dere­chos huma­nos, con­de­nán­do­los, de manera anti­ci­pada, a una vida fran­ca­mente indigna, todo ello debido a la inca­pa­ci­dad de un Poder Judi­cial que no juzga, de un Minis­te­rio Público que no inves­tiga, y de una Poli­cía Nacio­nal que atra­ve­sando la peor cri­sis ins­ti­tu­cio­nal de su his­to­ria se suma a esta enfer­me­dad gene­ra­li­zada de nues­tro sis­tema de justicia.

¿Qué hacer frente a este pro­blema? Muchos son los diag­nós­ti­cos, y muchas más las voces de los espe­cia­lis­tas que a lo largo de los años han estu­diado el tema. Sin embargo, en esta opor­tu­ni­dad debe­mos des­ta­car la opi­nión del direc­tor del INPE, la cual com­par­ti­mos en todos sus extre­mos, pues lejos del acos­tum­brado dis­curso popu­lista y sin sus­tento téc­nico, afirma de manera clara que para com­ba­tir a la delin­cuen­cia, enten­dida esta como un pro­blema social, no basta con imple­men­tar una polí­tica cri­mi­nal basada en el aumento de penas y el recorte de bene­fi­cios peni­ten­cia­rios como si la solu­ción pasara por “man­dar a todos a la cár­cel”. Pro­ce­der de ese modo, es des­co­no­cer la reali­dad del pro­blema, pues a la larga lo único que se logrará es tener a más pre­sos por más tiempo en las cár­ce­les perua­nas. Debe­mos for­ta­le­cer la labor de pre­ven­ción y edu­ca­ción ciu­da­dana, así como tam­bién la labor de todos los orga­nis­mos invo­lu­cra­dos en esta pro­ble­má­tica. El Estado debe saber brin­dar una res­puesta mul­ti­sec­to­rial y no basar su accio­nar en polí­ti­cas neta­mente represivas.

Asi­mismo, es impres­cin­di­ble rede­fi­nir las com­pe­ten­cias del INPE y de la Poli­cía Nacio­nal del Perú en cuanto a cuál será la ins­ti­tu­ción encar­gada de velar externa e inter­na­mente por la segu­ri­dad y el orden en los pena­les. En la actua­li­dad con­ta­mos con pena­les a cargo de la Poli­cía, otros en manos del INPE, y otros en los cua­les ambas ins­ti­tu­cio­nes se repar­ten fun­cio­nes. Este pro­ce­der es abso­lu­ta­mente incohe­rente, debe­mos iden­ti­fi­car a la auto­ri­dad a cargo de esta labor y otor­garle todo nues­tro respaldo.

Lo que debe que­dar­nos claro es que la única manera de ope­ra­ti­vi­zar y apo­yar la labor de estas ins­ti­tu­cio­nes es mejo­rando sus pre­su­pues­tos asig­na­dos. El INPE, por ejem­plo, para hacer frente a esta sobre­po­bla­ción de 23000 reclu­sos requiere incor­po­rar a 3000 per­so­nas a su per­so­nal, requiere tam­bién la cons­truc­ción de 2 nue­vos pena­les valo­ri­za­dos en 200 millo­nes cada uno. Para ello, el INPE requiere una mejora pre­su­pues­tal sus­tan­tiva, como tam­bién lo requiere para el caso de las par­ti­das des­ti­na­das a mejo­rar las con­di­cio­nes de vida de los reclu­sos, cuyo número este año ascen­derá en 6000 nue­vos reclu­sos, pero que con­tra­dic­to­ria­mente verá un recorte eco­nó­mico de 23 millo­nes de soles para la ali­men­ta­ción y el cui­dado de la salud de los mis­mos y para la imple­men­ta­ción de un sis­tema de vigi­lan­cia elec­tró­nico en los exte­rio­res e inte­rio­res de los pena­les que per­mi­tan detec­tar deli­tos como los de corrup­ción de fun­cio­na­rios, no olvi­de­mos que muchas veces son los mis­mos fun­cio­na­rios los que ingre­san los celu­la­res, dro­gas, armas, bebi­das alcohó­li­cas y demás obje­tos prohi­bi­dos.

Pero nada de lo antes dicho ten­drá un impacto posi­tivo, nada podrá ser con­cre­tado, nin­guna pro­puesta será sufi­ciente, si el gobierno de turno y la socie­dad civil no se com­pro­me­ten con la solu­ción del pro­blema. Debe­mos enten­der, de una vez por todas, que inver­tir en mejo­rar las con­di­cio­nes de habi­ta­bi­li­dad de las cár­ce­les no es en modo alguno una con­ce­sión que hace el Estado con los cri­mi­na­les a los cua­les pre­mia con una mejor ali­men­ta­ción, con mejo­res ser­vi­cios de salud o alo­ja­miento, inver­tir en ello, es a la larga velar por nues­tra segu­ri­dad, com­ba­tiendo a las ban­das que ope­ran desde las cár­ce­les, ya que apos­tar por la reha­bi­li­ta­ción de los reclu­sos no es otra cosa que apos­tar por la reduc­ción del índice de rein­ci­den­cia criminal.

Rafael Rodrí­guez Cam­pos

Los 10 escándalos sexuales de políticos que escandalizaron al mundo

El 14 de mayo, Domi­ni­que Strauss– Kahn, direc­tor– gerente del Fondo Mone­ta­rio Inter­na­cio­nal, fue dete­nido por acu­sa­cio­nes de acoso sexual e intento de vio­la­ción hacia una reca­ma­rista de un hotel en Esta­dos Uni­dos (EEUU).

Ayer le fue negada la liber­tad bajo fianza a Strauss– Kahn, pues se teme que el gerente del FMI huya a Fran­cia y no pueda ser obli­gado a regre­sar y ser procesado.

Los car­gos que se le impu­tan son seis, de los cua­les los con­si­de­ra­dos más fuer­tes son intento de vio­la­ción, acto sexual delic­tivo y deten­ción ile­gal; estos son los más altos en la escala de agre­sión sexual pues inclu­yen el uso de la violencia.

Cabe men­cio­nar que sólo por el delito de intento de vio­la­ción podría enfren­tar de 15 a 20 años de cárcel.

Este no es el único caso de este tipo que se conoce, a lo largo del tiempo, muchos polí­ti­cos, empre­sa­rios y gente de la farán­dula se ha visto envuelta en escán­da­los sexua­les y acu­sa­cio­nes de esta índole.

Sexe­nio te pre­senta los 10 casos más sobre­sa­lien­tes de escán­da­los de políticos:

1. Bill Clin­ton: cuando era pre­si­dente de Esta­dos Uni­dos, Bill Clin­ton fue acu­sado de esta­ble­cer una rela­ción sexual con una beca­ria de la Casa Blanca de 23 años, Mónica Lewinsky. Luego de un jui­cio y muchos escán­da­los, Clin­ton se dis­culpó y con­ti­nuó su mandato.

2. Sil­vio Ber­lus­coni: en este inicio de año, el pri­mer minis­tro de Ita­lia, fue acu­sado de deli­tos sexua­les y abuso de poder, por lo que irá a jui­cio el 6 de abril. Está acu­sado de pros­ti­tu­ción de meno­res, man­te­ner rela­cio­nes sexua­les con meno­res y abuso de poder al pre­sio­nar a la poli­cía cuando arres­ta­ron a la menor de edad, Ruby, que pre­sun­ta­mente man­tuvo rela­cio­nes con él.

3. Daniel Ortega: el pre­si­dente de Nica­ra­gua fue acu­sado, en 2003, de abuso sexual con­ti­nuo a su hijas­tra Zoi­la­mé­rica Nar­váez. Final­mente, la hijas­tra dejó el pro­ceso penal en con­tra de su padrastro.

4. Fer­nando Lugo: el pre­si­dente de Para­guay, ex obispo, se vio envuelto en una fuerte polé­mica luego de que se reve­lara que tuvo tres hijos cuando toda­vía for­maba parte de la Igle­sia Católica.

5. Mario Marín Torres: a fina­les de 2005 se difun­dió una gra­ba­ción tele­fó­nica entre el ex gober­na­dor de Pue­bla y Kamel Nacif Borge, empre­sa­rio poblano, en la que Nacif agra­dece a Mario Marín por haber dete­nido a la perio­dista Lydia Cacho que recien­te­mente había publi­cado el libro Los demo­nios del Edén.

El libro denun­ciaba un nego­cio de por­no­gra­fía infan­til por parte del empre­sa­rio. En el audio, Nacif le ofrece al ahora famoso ‘gober pre­cioso’ –como se refi­rió a Marín– “dos bote­llas de coñac”, tér­mino que se espe­cula se refiere a meno­res de edad, para agra­de­cerle al gober­na­dor poblano su ayuda y apoyo en con­tra de las acu­sa­cio­nes de Cacho.

En 2010, se reveló otro audio donde el enton­ces gober­na­dor, Mario Marín, se rela­ciona con una mucha­cha de 17 años lla­mada Jes­sica. El audio apunta a que Marín y Jes­sica man­tu­vie­ron una rela­ción desde 1999.

6. Moshe Kat­sav: el ex pre­si­dente de Israel ha sido acu­sado en varias oca­sio­nes de abuso sexual y, en una oca­sión, de vio­la­ción, todo mien­tras era minis­tro de Turismo a fina­les de los 80.

7. George w. Bush: el padre de George Bush se vio envuelto en serias acu­sa­cio­nes en 1989 junto con Donald Reagan por una pre­sunta red de pros­ti­tu­ción homo­se­xual que se desem­pe­ñaba con fre­cuen­cia en la Casa Blanca; el pro­ceso no tras­cen­dió aun­que entre la lista se encon­tra­ron ofi­cia­les de gobierno, impor­tan­tes mili­ta­res, ban­que­ros, con­gre­sis­tas y demás per­so­nas de las altas esfe­ras estadunidenses.

8. Tho­mas Jef­fer­son: el prin­ci­pal autor de la decla­ra­ción de Inde­pen­den­cia de Esta­dos Uni­dos fue acu­sado de escla­vi­zar a Sally Hemings, una mujer con la que tuvo varios hijos.

9. Mark Foley: en sus tiem­pos de con­gre­sista repu­bli­cano en 2006, se le acusó de enviar men­sa­jes explí­ci­tos sexual­mente a diver­sas per­so­nas, entre ellas meno­res de edad, a tra­vés de varias pági­nas en Inter­net. La acu­sa­ción no pro­ce­dió por­que no se le pudo comprobar.

10. Larry Craig: sena­dor esta­du­ni­dense, fue acu­sado y con­de­nado por delito menor de con­ducta des­or­de­nada debido a que se le encon­tró teniendo acti­vi­dad sexual con otro hom­bre en el baño público del aero­puerto inter­na­cio­nal de Min­nea­po­lis– Saint Paul.

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Fuente: Sexe­nio

Cartas sucias y eróticas de James Joyce a su amada Nora Barnacle

 

“Escribe las pala­bras inde­cen­tes con gran­des letras y subrá­ya­las y bésa­las y res­trié­ga­te­las un momento por tu dulce…”

James Joyce y Nora Barnacle

Las lla­ma­das car­tas eró­ti­cas, car­tas sexua­les, car­tas roba­das dibu­jan a un James Joyce apa­sio­nado, lleno de las­ci­via y con­de­nando al ero­tismo de su mujer.

En Dublín Nora Bar­na­cle cono­ció a James Joyce, el 10 de junio de 1904 y le dio una cita en la calle Merrion Square, No. 1, frente a la casa del Sr. William Wilde. Nora no llegó; reci­bió del poeta una nota avi­sán­dole que él sí había lle­gado y que la había con­fun­dido momen­tá­nea­mente con otra seño­rita de igual apa­rien­cia, pero que lamen­ta­ble­mente no era ella. Se vol­vie­ron a ver unas noches des­pués, el 16 de junio, fecha de tal impor­tan­cia para Joyce, que hizo que su novela Uli­ses trans­cu­rriera ínte­gra­mente en la men­cio­nada fecha: 16 de junio de 1904.

Joyce tenía rela­cio­nes fre­cuen­tes con pros­ti­tu­tas y había adqui­rido cierta luju­ria y agre­siva sexua­li­dad, cosa que no carac­te­rizó el inicio del romance con Nora. A pesar de que ambos eran pasio­na­les y hasta muy esca­to­ló­gi­ca­mente explí­ci­tos en las car­tas que se envia­ban, y si bien es cierto que en su pri­mer encuen­tro Nora abrió la bra­gueta de Joyce y le aca­ri­ció hasta «hacerme hom­bre», Joyce y Nora no con­su­ma­ron una rela­ción sexual en esos días que se conocieron.

La prensa sen­sa­cio­na­lista nunca logrará emu­lar a los edi­to­res de las car­tas escri­tas por las plu­mas finas, ladro­nes de correo, fis­go­nes, perros que escul­can buzo­nes con la lupa de los doc­tos. Entre las car­tas céle­bres las amo­ro­sas son un capí­tulo intere­sante, pero las sexua­les son el sueño de todo voyeur, car­tas que se leen mojando los dedos entre página y página.

Joyce es el pri­mero de nues­tros corres­pon­sa­les rojos, sin hoz ni mar­ti­llo, escribe a Nora Ber­na­cle, su mujer sin ben­di­ción. Son las car­tas de un hom­bre de veinte siete años, un hom­bre con la exci­ta­ción sufi­ciente para escri­birle a su que­rida de treinta, anclada en Trieste: “Estoy todo el día exci­tado. El amor es un mal­dito fas­ti­dio, sobre todo cuando tam­bién está unido a la lujuria”.

Una de las car­tas de 1909, donde Joyce llama a Nora cari­ño­sa­mente “putita de ojos sal­va­jes”, fue subas­tada en el 2004 por Sotheby’s por más de 240.000 libras, lo que da una idea de la cali­dad de la escri­tura y la des­ti­na­ta­ria. Tres car­tas de Joyce en rabo­deají que sir­ven para acom­pa­ñar el epi­so­dio de rufia­nes de la Torre Mar­telo que apa­re­ció en nues­tro pri­mer número.

A Nora Bar­na­cle Joyce

22 Noviem­bre 1909

44 Fon­te­noy Street, Dublín.

Que­ri­dí­sima: tu tele­grama se encon­traba en su cora­zón aque­lla noche. Cuando te escribí aque­llas últi­mas car­tas, era presa de abso­luta deses­pe­ra­ción. Pen­saba que había per­dido tu amor y tu estima… como bien mere­cía. Tu carta de esta mañana es muy cari­ñosa, pero estoy espe­rando la carta que pro­ba­ble­mente escri­bi­rías des­pués de enviar el tele­grama.

Toda­vía no me atrevo, que­rida, a mos­trarme fami­liar con­tigo, hasta que no vuel­vas a darme per­miso. Tengo la sen­sa­ción de que no debo hacerlo, a pesar de que tu carta está escrita en tu anti­guo tono fami­liar y pícaro. Me refiero a cuando hablas de lo que harás, si te desobe­desco con res­pecto a cierta cuestión.

Voy a aven­tu­rarme a decir sólo una cosa. Dices que quie­res que mi her­mana te lleve ropa inte­rior. No, que­rida, por favor. No me gusta que nadie, ni siquiera una mujer o una niña, vea cosas que te per­te­ne­cen. Me gus­ta­ría que fue­ras más cui­da­dosa y no deja­ses cier­tas ropas tuyas por ahí, quiero decir cuando aca­ban de lle­gar de la lavan­de­ría. Oh, me gus­ta­ría que man­tu­vie­ras todas esas cosas ocul­tas, ocul­tas, ocul­tas. Me gus­ta­ría que tuvie­ses gran can­ti­dad de ropa inte­rior de todas cla­ses, de todo tipo de colo­res deli­ca­dos, guar­dada, plan­chada y perfumada.

¡Qué terri­ble es estar lejos de ti! ¿Has acep­tado de nuevo en tu cora­zón a tu pobre amante? Voy a estar impa­ciente por tu carta y, sin embargo, te agra­dezco tu cari­ñoso tele­grama.

No me pidas que te escriba una carta larga ahora, que­ri­dí­sima. Lo que he escrito me ha entris­te­cido un poco. Estoy can­sado de enviarte pala­bras. Nues­tros labios pega­dos, nues­tros bra­zos entre­la­za­dos, nues­tros ojos des­fa­lle­ciendo en el triste gozo de la pose­sión me com­pla­ce­rían más.

Per­do­name que­ri­dí­sima. Tenía inten­ción de mos­trarme más reser­vado. Y, sin embargo, debo año­rarte y año­rarte y añorarte.

JIM

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A Nora Ber­na­cle Joyce

2 de diciem­bre de 1909

44 Fon­te­noy Street, Dublín.

Que­rida mía, qui­zás debo comen­zar pidién­dote per­dón por la increí­ble carta que te escribí ano­che. Mien­tras la escri­bía tu carta repo­saba junto a mí, y mis ojos esta­ban fijos, como aún ahora lo están, en cierta pala­bra escrita en ella. Hay algo de obs­ceno y las­civo en el aspecto mismo de las car­tas. Tam­bién su sonido es como el acto mismo, breve, bru­tal, irre­sis­ti­ble y diabólico.

Que­rida, no te ofen­das por lo que escribo. Me agra­de­ces el her­moso nom­bre que te di. ¡Sí, que­rida, “mi her­mosa flor sil­ves­tre de los setos” es un lindo nom­bre¡ ¡Mi flor azul oscuro, empa­pada por la llu­via¡ Como ves, tengo toda­vía algo de poeta. Tam­bién te rega­lare un her­moso libro: es el regalo del poeta para la mujer que ama. Pero, a su lado y den­tro de este amor espi­ri­tual que siento por ti, hay tam­bién una bes­tia sal­vaje que explora cada parte secreta y ver­gon­zosa de él, cada uno de sus actos y olo­res. Mi amor por ti me per­mite rogar al espí­ritu de la belleza eterna y a la ter­nura que se refleja en tus ojos o derri­barte debajo de mí, sobre tus sua­ves senos, y tomarte por atrás, como un cerdo que monta una puerca, glo­ri­fi­cado en la sin­cera peste que asciende de tu tra­sero, glo­ri­fi­cado en la des­cu­bierta ver­güenza de tu ves­tido vuelto hacia arriba y en tus bra­gas blan­cas de mucha­cha y en la con­fu­sión de tus meji­llas son­ro­sa­das y tu cabe­llo revuelto.

Esto me per­mite esta­llar en lagri­mas de pie­dad y amor por ti a causa del sonido de algún acorde o caden­cia musi­cal o acos­tarme con la cabeza en los pies, rabo con rabo, sin­tiendo tus dedos aca­ri­ciar y cos­qui­llear mis tes­tícu­los o sen­tirte fro­tar tu tra­sero con­tra mí y tus labios ardien­tes chu­par mi polla mien­tras mi cabeza se abre paso entre tus rolli­zos mus­los y mis manos atraen la aco­ji­nada curva de tus nal­gas y mi len­gua lame voraz­mente tu sexo rojo y espeso. He pen­sado en ti casi hasta el des­fa­lle­ci­miento al oír mi voz can­tando o mur­mu­rando para tu alma la tris­teza, la pasión y el mis­te­rio de la vida y al mismo tiempo he pen­sado en ti hacién­dome ges­tos sucios con los labios y con la len­gua, pro­vo­cán­dome con rui­dos y cari­cias obs­ce­nas y haciendo delante de mí el más sucio y ver­gon­zoso acto del cuerpo. ¿Te acuer­das del día en que te alzaste la ropa y me dejaste acos­tarme debajo de ti para ver cómo lo hacías? Des­pués que­daste aver­gon­zada hasta para mirarme a los ojos.

¡Eres mía, que­rida, eres mía¡ Te amo. Todo lo que escribí arriba es un solo momento o dos de bru­tal locura. La última gota de semen ha sido inyec­tada con difi­cul­tad en tu sexo antes que todo ter­mine y mi ver­da­dero amor hacia ti, el amor de mis ver­sos, el amor de mis ojos, por tus extra­ña­mente ten­ta­do­res ojos llega soplando sobre mi alma como un viento de aro­mas. Mi verga esta toda­vía tiesa, caliente y estre­me­cida tras la última, bru­tal enves­tida que te ha dado cuando se oye levan­tarse un himno tenue, de pia­doso y tierno culto en tu honor, desde los oscu­ros claus­tros de mi cora­zón.

Nora, mi fiel que­rida, mi pícara cole­giala de ojos dul­ces, sé mí puta, mí amante, todo lo que quie­ras (¡mí pequeña pajera amante! ¡mí putita picha­dora!) eres siem­pre mi her­mosa flor sil­ves­tre de los setos, mi flor azul oscuro empa­pada por la lluvia.

JIM

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A Nora Bar­na­cle Joyce

3 de diciem­bre de 1909

44 Fon­te­noy Street, Dublín.

Mi que­rida niñita de las mon­jas: hay algún estre­lla muy cerca de la tie­rra, pues sigo presa de un ata­que de deseo febril y ani­mal. Hoy a menudo me dete­nía brus­ca­mente en la calle con una excla­ma­ción, siem­pre que pen­saba en las car­tas que te escribí ano­che y ante­no­che. Deben haber pare­cido horri­bles a la fría luz del día. Tal vez te haya des­agra­dado su gro­se­ría. Sé que eres una per­sona mucho más fina que tu extraño amante y, aun­que fuiste tu misma, tu, niñita calen­tona, la que escri­bió pri­mero para decirme que esta­bas impa­ciente por­que te culiara, aún así supongo que la sal­vaje sucie­dad y obs­ce­ni­dad de mi res­puesta ha supe­rado todos los lími­tes del recato. Cuando he reci­bido tu carta urgente esta mañana y he visto lo cari­ñosa que eres con tu des­pre­cia­ble Jim, me he sen­tido aver­gon­zado de lo que escribí. Sin embargo, ahora la noche, la secreta y peca­mi­nosa noche, ha caído de nuevo sobre el mundo y vuelvo a estar solo escri­bién­dote y tu carta vuelve a estar ple­gada delante de mí sobre la mesa. No me pidas que me vaya a la cama, que­rida. Déjame escri­birte, querida.

Como sabes que­ri­dí­sima, nunca uso pala­bras obs­ce­nas al hablar. Nunca me has oído, ¿ver­dad?, pro­nun­ciar una pala­bra impro­pia delante otras per­so­nas. Cuando los hom­bres de aquí cuen­tan delante de mí his­to­rias sucias o las­ci­vas, ape­nas son­río. Y, sin embargo, tu sabes con­ver­tirme en una bes­tia. Fuiste tu misma, tu, quien me des­li­zaste la mano den­tro de los pan­ta­lo­nes y me apar­taste sua­ve­mente la camisa y me tocaste la pinga con tus lar­gos y cos­qui­llean­tes dedos y poco a poco la cogiste entera, gorda y tiesa como estaba, con la mano y me hiciste una paja des­pa­cio hasta que me vine entre tus dedos, sin dejar de incli­narte sobre mí, ni de mirarme con tus ojos tran­qui­los y de santa. Tam­bién fue­ron tus labios los pri­me­ros que pro­nun­cia­ron una pala­bra obs­cena. Recuerdo muy bien aque­lla noche en la cama en Pola. Can­sada de yacer debajo de un hom­bre, una noche te ras­gaste el cami­són con vio­len­cia y te subiste encima para cabal­garme des­nuda. Te metiste la pinga en el coño y empe­zaste a cabal­garme para arriba y para abajo. Tal vez yo no estu­viera sufi­cien­te­mente arre­cho, pues recuerdo que te incli­naste hacia mi cara y mur­mu­raste con ter­nura: “¡Fuck me, dar­ling!”

Nora que­rida, me moría todo el día por hacerte uno o dos pre­gun­tas. Per­mí­te­melo, que­rida, pues yo te he con­tado todo lo que he hecho en mi vida; así, que puedo pre­gun­tarte, a mi vez. No sé si las con­tes­ta­rás. Cuándo esa per­sona cuyo cora­zón deseo vehe­men­te­mente dete­ner con el tiro de un revól­ver te metió la mano o las manos bajo las fal­das, ¿se limitó a hacerte cos­qui­llas por fuera o te metió el dedo o los dedos? Si lo hizo, ¿subie­ron lo sufi­ciente como para tocar ese gallito que tie­nes en el extremo del coño? ¿Te tocó por detrás? ¿Estuvo hacién­dote cos­qui­llas mucho tiempo y te viniste? ¿Te pidió que lo toca­ras y lo hiciste? Sino lo tocaste, ¿se vino sobre ti y lo sentiste?

Otras pre­gunta, Nora. Sé que fui el pri­mer hom­bre que te folló, pero, ¿te mas­turbó un hom­bre alguna vez? ¿Lo hizo alguna vez aquel mucha­cho que te gus­taba? Dímelo ahora, Nora, res­ponde a la ver­dad con la ver­dad y a la sin­ce­ri­dad con la sin­ce­ri­dad. Cuando esta­bas con él de noche en la oscu­ri­dad de noche, ¿no des­abro­cha­ron nunca, nunca, tus dedos sus pan­ta­lo­nes ni se des­li­za­ron den­tro como rato­nes? ¿Le hiciste una paja alguna vez, que­rida, dime la ver­dad, a él o a cual­quier otro? ¿No sen­tiste nunca, nunca, nunca la pinga de un hom­bre o de un mucha­cho en tus dedos hasta que me des­abro­chaste el pan­ta­lón a mí? Si no estás ofen­dida, no temas decirme la ver­dad. Que­rida, que­rida esta noche tengo un deseo tan sal­vaje de tu cuerpo que, si estu­vie­ras aquí a mi lado y aún cuando me dije­ras con tus pro­pios labios que la mitad de los pata­nes peli­rro­jos de la región de Gal­way te echa­ron un polvo antes que yo, aún así corre­ría hasta ti muerto de deseo.

Dios Todo­po­de­roso, ¿qué clase de len­guaje es este que estoy escri­biendo a mi orgu­llosa reina de ojos azu­les? ¿Se negará a con­tes­tar a mis gro­se­ras e insul­tan­tes pre­gun­tas? Sé que me arriesgo mucho al escri­bir así, pero, si me ama, sen­tirá que estoy loco de deseo y que debo con­tarle todo.

Cielo, con­tés­tame. Aun cundo me entere de que tu tam­bién habías pecado, tal vez me sen­ti­ría toda­vía más unido a ti. De todos modos, te amo. Te he escrito y dicho cosas que mi orgu­llo nunca me per­mi­ti­ría decir de nuevo a nin­guna mujer.

Mi que­rida Nora, estoy jadeando de ansia por reci­bir tus res­pues­tas a estas sucias car­tas mías. Te escribo a las cla­ras, por­que ahora siento que puedo cum­plir mi pala­bra con­tigo. No te enfa­des, que­rida, que­rida, Nora, mi flo­re­ci­lla sil­ves­tre de los setos. Amo tu cuerpo, lo añora, sueño con él.

Háblenme que­ri­dos labios que he besado con lágri­mas. Si estas por­que­rías que he escrito te ofen­den, hazme recu­pe­rar el jui­cio otra vez con un lati­gazo, como has hecho antes. ¡Qué Dios me ayude!

Te amo Nora, y parece que tam­bién esto es parte de mi amor. ¡Per­dó­name! ¡Perdóname!

JIM

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Mi Dulce y pícara putita, aquí te mando otro billete para que te com­pres cal­zo­nes o medias o ligas. Com­pra cal­zo­nes de puta, amor, y no dejes de rociar­los con un per­fume agra­da­ble y tam­bién des­co­lo­rea­los un poquito por detrás.

Pare­ces inquieta por saber que aco­gida dí a tu carta, que, según dices, es peor que la mia. ¿Cómo que es peor que la mía, amor ? Sí, es peor en una o dos cosas. Me refiero a la parte en que dice lo que vas a hecer con la len­gua (no me refiero a chu­par­mela) y a esa encan­ta­dora pala­bra que escri­bes con tan gran­des letras y sub­ra­yas, bri­bon­zuela. Es emo­cio­nante oír esa pala­bra ( y una o dos más que no has escrito) En los labios de una mucha­cha. Pero me gus­ta­ría que habla­ras de ti y no de mi. Escrí­beme una carta muy larga, llena de esas otras cosas, sobre ti, que­rida. Ahora ya sabes como ponerme arre­cho. Cuen­tame hasta las cosas más míni­mas sobre ti, con tal de que sean obse­nas y secre­tas y sucias. No escri­bas más. Qué todas las fra­ses estén lle­nas de pala­bras y soniods inde­cen­tes e impú­di­cos. Es encan­ta­dor oir­los e incluso ver­los en el papel, pero los más inde­cen­tes son los más bellos. Las dos par­tes de tu cuerpo que hacen cosas sucias son las más deli­cio­sas para mi. Pre­fiero tu culo, que­rida, a tus tetas por­que hace esa cosa sucia. Amo tu coño no tanto por que sea la parte que jodo cuanto por­que hace otra cosa sucia. Podría que­darme tum­bado todo el día mirando la pala­bra divina que escri­biste y lo que dijiste que harías con la len­gua. Me gus­ta­ría poder oír tus labios sol­tando entre chis­po­rro­teos esas pala­bras celes­tia­les, exci­tan­tes, sucias, ver tu cuerpo soni­dos y rui­dos inde­cen­tes, sen­tir tu cuerpo retor­cien­dose debajo de mi, oír y oler los sucios y sono­ros pedos de niñas haciendo pop pop al salir de tu bonito culo de niña des­nudo y follar, follar, follar y follar el coño me mi pícara y arre­cha putita eternamente.

Ahora estoy con­tento, por­que mi putita me dice que le dé por el culo y que la folle por la boca y quiere des­abro­charme y sacarme el cim­bel y chu­parlo como un pezón. Más cosas y más inde­cen­tes que estas quiere hacer, mi pequeña y des­nuda folla­dora, mi pícara y ser­peante pequeña culia­dora, mi dulce e inde­cente pedorrita.

Bue­nas noches, putita mía, voy a tum­barme y a cas­car­mela hasta que me venga. Escribe más cosas y más inde­cen­tes, que­rida. Hasta cos­qui­llas en el mon­don­guito, mie­tras escri­bes para que te haga decir cosas cada vez peo­res. Escribe las pala­bras inde­cen­tes con gran­des letras y subrá­ya­las y bésa­las y res­trié­ga­te­las un momento por tu dulce y caliente coño, que­rida, y tam­bién leván­tate las fal­das un momento y res­trié­ga­te­las por tu que­rido culito pedorro. Has más cosas así, si quie­res, y des­pués envíame la carta, mi que­rida putita de culo marrón.

JIM


Car­tas Sucias de Joyce

Epí­logo

La des­pe­dida de una de las tan­tas car­tas sucias, de las car­tas celo­sas y dis­pa­ra­ta­das que solo cabrían en un buzón bien rojo, ser­virá de epi­logo para los fis­go­nes de la corres­pon­den­cia entre Jim y Nora. Una página fechada el 15 de diciem­bre de 1909, vís­pe­ras de la novena de agui­nal­dos en la cató­lica Dublín. Con esto que­dan cla­ras las dul­ces fati­gas del amante y corres­pon­sal, el can­san­cio de los amo­res lejanos.

« (…) Que­rida, acabo de venirme en los pan­ta­lo­nes, por lo que he que­dado para el arras­tre. No puedo ir hasta la ofi­cina de correos a pesar de que tengo tres car­tas por echar.

¡A la cama…a la cama !

¡Bue­nas noches, Nora mía!